Al Tudelano le va a tocar sufrir hasta final de temporada. Lo que parecía una recta final centrada en la próxima campaña, tras los vaivenes en el banquillo, el efímero paso de Clarkson por Tudela y el mal año como local, se complica ahora con la mala racha acumulada por el equipo blanquillo. La derrota de este domingo ante el Racing Club de Ferrol (0-1) deja tocados a los jugadores, que afrontan ahora seis jornadas decisivas para sellar cuanto antes la permanencia. Los equipos implicados en la lucha por la salvación aprietan y suman, parecen ir de menos a más. Así que la tarea, a priori alcanzable, no se antoja nada cómoda.
Frente al Racing de Ferrol, el Tudelano no completó un partido destacado como estaba acostumbrando en las últimas jornadas. Los blanquillos no jugaron mal ni ante el Racing de Santander ni ante el Celta B ni ante el Pontevedra, pero tampoco lograron obtener premio de su esfuerzo. Este domingo, su primer tiempo fue más que digno, pero el tempranero gol de Joselu en el Ciudad de Tudela volvió a pesar como una losa y los minutos les fueron desconectando progresiva y dolorosamente del choque.
El cuadro visitante prácticamente se topó con el primer y único tanto de la tarde en una jugada muy rápida en la que su delantero centro estuvo al quite para batir a Pagola y enmudecer a la grada. Restaba mucho tiempo y los de Iñigo Valencia se lanzaron a por el empate con una buena disposición táctica y ritmo en los ataques. Fruto de la insistencia inmediatamente posterior al gol gallego, Óscar Vega tuvo en su cabeza el 1-1, pero su remate a bocajarro y en plancha lo repelió la cruceta, cuando el meta Mackay estaba más que vendido. El pamplonés falló en esta jugada decisiva pero fue uno de los más activos del cuadro local, recuperando sensaciones como segundo delantero al lado de Vélez. Los acercamientos, ya con menos precisión y basados en jugadas de estrategia o balones largos, continuaron hasta el descanso. El Tudelano, al menos, había contagiado al público con brega y valentía a la hora de plantar cara a su rival.
Pero en el segundo periodo el Tudelano se desinfló de forma estrepitosa. Atrapado en las jugadas de choque, en los constantes balones divididos que ganaban los ferrolanos y en la dureza de algunas jugadas, terminaron por descentrarse. No hubo una sola internada, combinación o jugada de peligro real hasta la recta final del choque. A falta de un minuto, Ion Vélez se encontró abruptamente con un pase largo de Ardanaz que no logró ni controlar ni empujar, aunque se había quedado solo ante el guardameta del Racing de Ferrol. Fue la última chispa de una tarde inestable en lo meteorológico y no demasiado alegre en lo futbolístico. El Tudelano tiene ahora seis jornadas por delante con visitas difíciles (Burgos, Valladolid) y dos derbis navarros como local (Promesas e Izarra) para no empeorar el amargor de una temporada cuya lista de infortunios y sobresaltos no ha cesado de engordar.
Ficha técnica
TUDELANO: Pagola; Delgado, Nandi, Lalaguna, Meseguer; Javi Cabezas (Chema Mato, m.63), Iñigo Ros, Lázaro, Ardanaz; Ion Vélez y Óscar Vega.
RACING FERROL: Mackay; Cruz, Víctor Vázquez, Nano, Maceira; Gonzalo, Rafa García; Armental, Pablo Rey (Bicho, m.79), de Paz (Laro Setién, m.62); y Joselu (Mendigutxia, m.87).
ÁRBITRO: Ávalos Martos (Comité Catalán), asistido por Gómez y Calle. Amonestó por el Tudelano a Óscar Vega, Nandi y Delgado y por el Racing Club a Pablo Rey.
GOL: 0-1, m.11: Joselu.
INCIDENCIAS: Unos 350 espectadores en el Ciudad de Tudela. Una de las entradas más pobres de la temporada.
