Árboles a la altura de tu jardín
L os árboles son uno de los elementos más atractivos a la hora de decorar un jardín y contar con un espacio pequeño no significa tener que renunciar a disfrutar de ellos. Numerosas especies, eso sí, de reducido tamaño, nos pueden ayudar a conseguir pequeños paraísos en nuestro hogar. Así, árboles esféricos, tilos, especies campestres en espaldera, arbustos moldeados con la forma que nosotros elijamos y acebos de hoja perenne resultan perfectos para estos jardines. Entre las ventajas que presentan estos ejemplares, destaca el que todos ellos son lo suficientemente bajos como para dejar entrar la luz del día por todas las ventanas de la casa.
Dos son los aspectos en que podemos centrarnos para elegir el árbol que más nos interesa para nuestro hogar. Uno de ellos pasa por decantarnos por las especies que mejor responden a la poda, como pueden ser el tilo, el abedul péndulo, el zumaque de astas de ciervo, el acebo multicolor, la catalpa o el arce. Además, otra de las ventajas que presentan estos árboles es que se dejan guiar en todo tipo de formas. Si nos centramos en el tilo, podemos destacar que es muy bueno a la hora de dar sombra. Además, durante el invierno sus ramas desnudas apenas quitan luz, mientras que en verano mantienen la casa fresca gracias a su pantalla de hojas.
Grandes en miniatura
La forma de estas últimas también resulta importante a la hora de elegir un árbol en miniatura. Las de mayor tamaño (como la catalpa, árbol con hojas grandes y acorazadas en verticilo) acentúan la forma, siendo muy apropiados para podar en forma de esfera, mientras que los de hoja pequeña, como el abedul, dejan pasar la luz.
El jardín, a punto
Si lo que te gustan son los gigantes de los jardines de antaño, ahora hay muchas variedades que han sido injertadas en un pie de 1 a 2,5 metros, que puedes mantener en el tamaño deseado mediante la poda anual. Junto a estos, también podrás plantar en la primavera algunos frutales (manzano, peral, ciruelo y cerezo) para obtener tu propia cosecha en el otoño.
Con todas estas especies puedes lograr efectos muy interesantes, sobre todo en un jardín pequeño. Además, de un árbol se disfruta durante todo el año: en la primavera del verdor de sus hojas, en el verano de su sombra, y en el otoño de los colores tierra y dorados con que nos obsequia.