El Gobierno de Navarra ha activado la campaña invernal de prevención y extinción de incendios forestales, que contempla un refuerzo del personal y los medios materiales disponibles entre el 15 de enero y el 10 de abril en los parques de bomberos de las zonas de más riesgo durante la temporada invernal, cuando el origen de los incendios suele estar vinculado a quemas incontroladas derivadas del uso del fuego para la mejora de pastos naturales o para trabajos silvícolas. Los departamentos de Presidencia, Justicia e Interior y de Desarrollo Rural y Medio Ambiente colaboran desde 2002 en la realización de esta campaña invernal de prevención de incendios forestales, en coordinación con el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino. Sus acciones se centran en dos áreas diferenciadas pero complementarias, como son el apoyo al sector ganadero en la realización de incendios controlados para la gestión de pastos (las denominadas ‘quemas preventivas’, que se realizan de acuerdo con lo determinado en la orden foral 501/2009, previa autorización del Departamento de Medio Ambiente) y la extinción de incendios propiamente dicha.
En la campaña de este año, que sigue la línea del año pasado, se reforzarán con sendos Equipos de Prevención Integral de Incendios Forestales (EPRIF) los parques de Oronoz-Mugairi y Burguete, con radio de acción en las zonas tradicionalmente más conflictivas, como son el valle de Baztan, la regata del Bidasoa y la zona pirenaica. Los dos equipos EPRIF, compuestos por personal de la Agencia Navarra de Emergencias (ANE) y del Ministerio de Medio Ambiente, apoyan la labor de los promotores de los fuegos controlados, responsables de realizarlos con las debidas garantías (personal y medios suficientes) y los días considerados de menor riesgo, por las condiciones de viento, temperatura y humedad. El objetivo es ayudar al ganadero a realizar las quemas de manera planificada y eficaz, para evitar los fuegos descontrolados que se traducen en incendios forestales.
Trabajo multidisciplinar
Los citados parques de Oronoz-Mugairi y Burguete contarán durante la campaña de invierno con 18 conductores y diez peones adicionales, así como una refuerzo material compuesto por dos vehículos autobomba, dos vehículos ligeros de transporte de personal y ocho mochilas extintoras. Además, los días en los que las predicciones meteorológicas marquen un nivel de riesgo elevado se realizarán vuelos de vigilancia preventiva con un helicóptero Eco Charli 2. El personal de refuerzo colaborará en el control de las quemas preventivas, realizará labores de conocimiento del territorio y vigilancia, con rondas móviles de observación, y participará en los posibles dispositivos de extinción de incendios forestales, así como en otro tipo de labores divulgativas y preventivas (documentación y adecuación de herramientas disponibles para el desbroce de vegetación y ubicación de puntos de abastecimiento de agua para vehículos y medios aéreos).
En la campaña forestal de invierno de 2010 se produjeron 229 incendios en los que ardieron 243,59 hectáreas, 15,65 de ellas de arbolado, lo que supone una reducción del 48% respecto a las 462 hectáreas incendiadas en 2009, 49,6 de ellas de arbolado (más del triple que el ejercicio anterior). Por meses, en enero de 2010 ardieron 9,3 hectáreas, 27,6 en febrero y 206,5 en marzo, período en el que acostumbran a concentrarse los incendios por quemas de rastrojeras. Los datos de abril no fueron representativos.
