Tudela

Unas 800 personas arroparon el inicio en Tudela de Korrika 16

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Han pasado seis días desde el inicio de la XVI edición de la Korrika en Tudela y la carrera sigue su curso por carreteras y pueblos del País Vasco, para concluir en Vitoria este domingo día 5. Atrás quedarán 2.503 kilómetros de carrera en favor de la normalización del euskera, 54 de los cuales se vendieron a cuadrillas, colectivos y particulares de la Ribera, tal y como confirmó la responsable de AEK en Tudela, Alizia Iribarren. Precisamente ella tuvo el honor de portar el primer testigo de Korrika 16, a lo largo de un kilómetro, que compartió con dos alumnos de la ikastola Argia (Iñaki Giménez y Nerea Mármol) y que, según explicó, “me supuso una enorme ilusión que compartí con toda la gente de la Ribera involucrada con el euskera”.

Cerca de 800 personas arroparon el comienzo de la marcha en la capital ribera, donde recorrió las calles Herrerías, Yanguas y Miranda, plaza de los Fueros, Gaztambide Carrera, Avenida de Zaragoza, Baquero Jacoste y carretera de Tarazona, desde la que tomó rumbo hacia Cascante y posteriormente hacia Castejón y Cadreita. En la noche del mismo día 26, Korrika 16 abandonó la Ribera, tras atravesar Milagro, en dirección a San Adrián. El lema de esta edición es “Ongi etorri, euskaraz bizi nahi dugunon herrira - Bienvenid@s al pueblo que quiere vivir en euskera”, lo cual “quedó muy patente el día del inicio en Tudela”, según reconoció Iribarren.

Aunque todavía es pronto para conocer la recaudación obtenida en esta nueva edición de la Korrika, Alizia Iribarren apuntó que “estamos muy contentos por el apoyo recibido” y aclaró que “la Korrika no pasa sólo por aquellos pueblos que han comprado kilómetro sino que se eligen las localidades por las que pasará y luego éstas empiezan a trabajar por la carrera. No al revés”.

Denuncia desde UPN

Para la responsable de AEK, todavía queda mucho trabajo por hacer en favor de la normalización del euskera, ya que “aunque ahora se habla más en la calle, seguimos siendo considerada una zona no vascófona y es difícil. El rechazo de los políticos no ayuda nada”, dijo.