Doctora Orrico, ¿qué es la mesoplastia facial o el rejuvenecimiento facial integral?
Un conjunto de técnicas que, sin cirugía, y sólo con aguja, mediante inyección de vitaminas, antioxidantes, oligoelementos y factores de crecimiento propios, junto al ácido hialurónico y la toxina botulínica (botox), logran un rejuvenecimiento y un tratamiento de la flacidez facial, aportando nutrientes y creando unas columnas tensionales químicas, para mantener los tejidos y nutrir la piel y el tejido celular subcutáneo, al estimular los procesos metabólicos de reestructuración cutánea.
¿Cómo se realiza el tratamiento?
Primero hay que realizar un diagnóstico del paciente y confeccionar un protocolo de tratamiento según sus necesidades. Los pacientes se clasifican en seis grupos: el uno sería el de envejecimiento leve, con una cierta flacidez, con algún ligero fruncimiento del entrecejo y con los surcos nasogeneanos un poco pronunciados. El último sería el seis, con pacientes que presentan una cara con muchos estigmas de envejecimiento. Para cada grupo se establecen unas pautas de tratamiento y descanso.
Las diferentes sustancias ¿dónde y cómo se aplican?
Los materiales de relleno, en las distintas depresiones faciales. La toxina botulínica (botox) se aplica para borrar la arruga de expresión facial, en la parte superior del rostro. Y con las vitaminas, oligoelementos y factores de crecimiento se hacen unas inyecciones intradérmicas, para crear las columnas tensionales. Éstas se inyectan en la región malar y temporal (zona de pómulos) haciendo un efecto lifting del tercio medio de la cara, regenerando el tejido celular subcutáneo y la piel. El rejuvenecimiento se consigue porque, aparte de tratar las arrugas, se mejora la calidad de la piel, su brillo, tersura y textura.
¿Es un tratamiento indicado también para hombres?
Por supuesto. Se realiza tanto en mujeres como en hombres; el tratamiento es indistinto. No se necesita ningún tipo de preparación previa y, tras su aplicación, las personas se incorporan inmediatamente a la vida social. Se realiza totalmente de forma ambulatoria, sin anestesia. En todo caso, se puede poner un poco de anestesia en crema, para mitigar el dolor de la punción. Pero la aguja es muy fina, y es prácticamente indoloro.
¿A partir de qué edad se puede someter una persona a estos tratamientos?
Se pueden realizar desde el momento en que la paciente siente que se inicia el proceso de envejecimiento. Hay jóvenes que con 22 ó 23 años se someten a este tratamiento.
¿Qué duración tienen los efectos de estas técnicas?
La mejoría es progresiva desde la primera sersión, y el resultado es permanente si se realiza un mantenimiento.
¿Existe alguna contraindicación del tratamiento?
Primero hay que realizar un buen diagnóstico y una buena historia clínica. Está contraindicado en pacientes con alergia a alguno de los productos utilizados. Además, no se debe tomar antiinflamatorios antes de la sesión, porque produciríamos más hematomas y/o sangrado. Tampoco se debe tomar el sol inmediatamente.
El botox es una toxina, ¿existen riesgos para el organismo en su aplicación para la desaparición de las arrugas de la parte superior de la cara?
El tratamiento es absolutamente local y actúa únicamente a nivel de la placa motora, provocando el bloqueo de una sustancia. No tiene una acción general, son muy pocas unidades.
Se han dado casos de personas que con tratamientos faciales de este tipo tienen unas caras hinchadas, con expresiones antinaturales.
De lo que se trata es de hacer un rejuvenecimiento integral, sin deformar las características del rosto y manteniendo la expresión. Hay que hacerlo sin sobrerrelleno y manteniendo la expresión natural de cada rostro
