Conseguir que la interculturalidad sea algo de la vida diaria. Ese ha sido uno de los objetivos de las Jornadas Interculturales que se han celebrado en Tudela de la mano del Centro Cultural Castel-Ruiz en colaboración con la Asociación de Servicios y Mediación Intercultural de Navarra (Asmina). Unas jornadas que, pese a que no han tenido la asistencia esperada, han sido valoradas de forma positiva por los organizadores. “Esperábamos un poco más de afluencia, pero sabemos que, por las fechas, ha sido difícil”, explicó Abdelatif Chachai, responsable de Asmina.
Para fomentar la relación entre los distintos colectivos que actualmente viven en la ciudad, no faltaron las charlas-debate. “Han sido muy buenas. Han dado bastante información, por lo que la gente que ha participado en ellas se ha ido con otras ideas, lo que supone un enriqueciminto”, comentó Chachai. Estas han estado enfocadas a los jóvenes, a las mujeres y al colectivo inmigrante en general a la hora de hablar de sus derechos políticos y sociales.
Durante las cuatro jornadas dedicadas a la interculturalidad, tampoco han faltado talleres y gymkhanas para los más pequeños, así como degustaciones de productos típicos de distintos lugares y representaciones del folclore popular. Estos dos últimos fueron precisamente los ingredientes fundamentales de la fiesta de clausura de las jornadas. Un centenar de personas se acercaron hasta el patio del centro cultural el pasado sábado para seguir de cerca las actuaciones de salsa, percusión y de los Gaiteros de Tudela que pusieron punto y final a esta experiencia que podría tener continuación el próximo año. “La intención es repetir, pero nos gustaría que la gente nos aportara más ideas para que estas no sean sólo las del servicio de mediación intercultural”, añadió Chachai.
