El sofá
Decorar la casa donde habitas es una tarea difícil que hay que afrontar con ayuda de todos los que la habitan, y con la ayuda de los profesionales que puedan adaptarse a tus preferencias y a tu bolsillo. Pero ante todo, hay que tener claro que nuestro hogar es el lugar de descanso, nuestro refugio y el del resto de miembros de la familia,
y es más que probable que las preferencias de todos no sean coincidentes.
Conviene puntualizar que en una casa existen unas zonas comunes, como el salón, y otras privadas como los dormitorios, en los que habrá que respetar al máximo los gustos personales de cada morador, y alcanzar así nuestro objetivo principal, conseguir un grado máximo de comodidad y confort general de todo para todos.
Pero indudablemente será la forma del salón lo que nos ayude a averiguar cómo podemos amueblarlo y decorarlo, y simulando un puzzle pensaremos en un todo a la vez; pero como algo independiente: Un único sofá o varios, una mesita junto a una ventana, un sillón de lectura si nos cabe. En fin, todo lo necesario para conseguir un espacio polivalente con una atmósfera de descanso y relax que nos invite al descanso.
El comedor
El sofá es el astro rey indiscutible del salón. Un buen sofá puede reportarnos momentos tranquilos y de descanso incluso mayores que una cama. Por ello, es muy importante que elijamos bien el tejido de nuestro sofá y, si tenemos niños en casa, pensar en un sofá desenfundable y de fácil lavado, aunque pongamos una protección, es posible que no evite completamente que alguna vez se manche. Pero a su vez, el sofá o los sofás se convertirán en un espacio más en el que habrá que pensar qué colocar, como por ejemplo unos bonitos cojines.
La mesita
Muchos salones disponen de manera integrada de un comedor de uso diario o extraordinario. Cuando sólo usamos el comedor en días señalados, éste cumple una función meramente decorativa, donde la funcionalidad ocupa un segundo plano, y puede sugerirnos otro estilo decorativo ya que no tiene por qué seguir la misma línea que el resto de mobiliario. Puede integrarse como algo independiente, que rompa la monotonía, y quizá evitemos una decoración lineal y aburrida que nos deprima.
Las mesas bajas delante de un gran sofá suelen estar presentes en la mayoría de salones, aunque cada vez se ven más los versátiles puff que cumplen la triple función de apoyar objetos sobre ellos, reposar las piernas después de un día cansado o, dispuestos de otra forma, como asientos que pueden cerrar la zona de descanso del salón.
