Nochebuena y Nochevieja
Existen numerosas teorías sobre el origen de la Navidad y el porqué de su instauración el 25 de diciembre y no en otro momento del año. Si nos centramos en el ámbito religioso, son los Evangelios los que proporcionan argumentos contradictorios acerca de la fecha del nacimiento de Cristo. Por un lado, está la gran complejidad de los calendarios judíos, griegos y latino. Existen incluso relatos de algunos cristianos que celebraron en sus orígenes el nacimiento de Cristo en los meses de marzo o abril. Por otro lado, se llegó al consenso de que la concepción de Cristo fue el 25 de marzo, fecha en la que el ángel se le apareció a María. Si esto fuera así, nueve meses después nacería Cristo, concretamente el 25 de diciembre.
Es desde finales del siglo IV cuando el cristianismo fija la tradición de celebrar la Navidad en la fecha que conocemos actualmente. Fue el Papa Julio I quien fijó esa fecha, día muy cercano al solsticio de invierno.
Es importante precisar que el tema de las fechas es controvertido en muchos aspectos, ya que también existen creencias de que Jesús nació entre cuatro y seis años antes del inicio de la era cristiana.
Dejando a un lado el origen de la Navidad y la disparidad de opiniones sobre la fecha del nacimiento de Cristo, sí que en la actualidad hemos acogido numerosas tradiciones, fiestas y celebraciones que asociamos a las fechas navideñas.
Día y noche de Reyes
La noche de Nochebuena simboliza la reunión de todos en torno al nacimiento de Cristo. En la actualidad, lo más característico de esta fecha es la llegada de Papá Noel con regalos y obsequios para todos los niños de la casa. Los orígenes de esta figura se remontan a la Edad Media, pero es en la Modernidad cuando este gordo bonachón adquiere su máxima importancia. Algunas teorías asocian sus colores y figura a la marca mundialmente conocida de la Coca-Cola, de ahí su color rojo, que ya apareció en numerosos spots publicitarios de esta bebida.
Es la Nochevieja una de las noches más divertidas de la Navidad. Pero no siempre se ha ligado la Nochevieja a las doce uvas de la suerte, a llevar una prenda interior de color rojo, o a reunirse en torno a una mesa con los familiares y amigos para conmemorar y festejar el nuevo año. Existen tradiciones tan dispares como echar unas gotas de plomo fundido en agua, algo que servía para que las solteras descubrieran el nombre y la profesión de su futuro marido; o tirar un zapato por el aire para averiguar la dirección por la que llegaría su futuro pretendiente.
Hoy, la Nochevieja es pura diversión repleta de abundantes cenas, confetis, disfraces en algunos lugares de España, serpentinas, champán, vestidos de fiesta o celebraciones hasta bien entrada la madrugada. Las tradiciones han dejado paso al consumismo y a la diversión y reunión entre familias y amigos.
Comidas y bebidas típicas
Es a partir del siglo XVIII cuando esta fecha toma su sentido más infantil, para competir principalmente con la tradición más arraigada hasta ese momento de San Nicolás o Papá Noel, tal y como lo conocemos en nuestro país.
En ese momento, los Reyes Magos llevaban a los más pequeños de la casa alimentos, ropa o calzado. Fue ya en el siglo XIX cuando comenzaron a traerles juguetes.
La noche de Reyes es considerada en la actualidad como una fecha muy festiva y de gran consumismo. Aún así, se siguen respetando tradiciones como que los niños dejen sus zapatos en las ventanas o debajo del Árbol de Navidad, para que los Magos dejen sus regalos. También se les deja comida y bebida a sus camellos, para que éstos puedan llegar con fuerzas a todos los hogares del mundo.
Las Cabalgatas de Reyes son los festivales más representativos de esta fecha. La multitud de niños y padres les espera impaciente en las calles de cada localidad para poder verlos de cerca e incluso tocarles. Hoy en día, la tradición de los camellos ha pasado prácticamente a la historia. Los tractores, los caballos, e incluso motos o coches de lujo, se han convertido en los medios de transporte más habituales entre sus Majestades.
Puede que lo más característico de esta fecha sea el enorme consumismo que impera en la sociedad. La compra de regalos (a pesar de la crisis en la que estamos sumidos), sigue siendo importante. Pero no son sólo los regalos, también la compra de grandes cantidades de comida, dulces, iluminación navideña, árboles de navidad, nacimientos, etc., que hacen que la Navidad y la fecha de Reyes en concreto, sea una de las más consumistas de todo el año.
Decoración navideña
Cualquier persona sabe que durante la Navidad uno come y bebe más que el resto del año. Las familias se reúnen en torno a la mesa en Nochebuena, Navidad, Nochevieja, Año Nuevo, o Reyes. Si en la antigüedad, cualquier plato era válido para festejar el nacimiento de Cristo, ahora son platos suculentos y perfectamente elaborados los que llenan nuestras mesas.
Dentro de la gran amplia variedad de platos que encontramos, es preciso destacar los asados de pavo, cordero, cabrito; el budín de Navidad, el pan dulce, el marisco de todo tipo; y postres como el roscón de Reyes, los mazapanes, polvorones, turrones variados, bombones de todo tipo, etc. También podríamos citar las bebidas más consumidas en esta fecha, de las que destaca principalmente el champán o cava, utilizado para brindar en cualquier mesa.
La tradición de la toma de las doce uvas, anteriormente citada, es típicamente española. Es un rito asociado a la suerte venidera para el próximo año. De hecho, ¿quién se ha perdido la retransmisión por televisión de la toma de las doce uvas? Es posible que muy pocos o ninguno.
