Tudela

Los trabajadores de la Residencia Nuestra Señora de Gracia se aislan y conviven con sus residentes

A pesar de no tener ningún caso de Covid-19 positivo, son conscientes de que nos dirigimos hacia las peores semanas.
Los trabajadores de la Residencia Nuestra Señora de Gracia de Tudela
photo_camera Los trabajadores de la Residencia Nuestra Señora de Gracia de Tudela

A pesar de no tener ningún caso de Covid-19 positivo, en la Residencia Nuestra Señora de Gracia son conscientes de que nos dirigimos hacia las peores semanas, con mayor riesgo y que estamos en una situación de alarma e inseguridad que sigue aumentando. Por esa razón un grupo de 22 trabajadores de forma voluntaria entraron el martes 24 por la mañana a la residencia para trabajar durante dos semanas dentro de forma aislada, sin entradas ni salidas y con ello a disminuir al máximo el riesgo de contagio. 

El resto de sus compañeros permanecerán en sus casas en cuarentena para evitar contagios y en caso necesario poder relevarnos al finalizar el periodo. De este modo desde la residencia se prevé que podrán dar continuidad a los cuidados con mayores garantías de seguridad. “Estamos trabajando muy intensamente para adoptar todas las medidas posibles. Al Departamento de Salud le pedimos que nos apoye con test rápidos en caso de ser necesarios y con refuerzo en equipos de protección si se confirmase algún positivo”, señala Begoña Moreno Valencia, directora de la residencia. “Estamos muy agradecidos por el apoyo que estamos recibiendo de familiares, de particulares y entidades de Tudela”, apostilla.

Durante estas dos semanas se puede seguir en contacto a través de videollamadas o llamadas al número fijo 948 822 600 o del correo electrónico [email protected].

“Podemos estar muy orgullosos del equipo de profesiones que ha demostrado un acto de generosidad y valentía al permanecer aislados de sus familias porque ahora la prioridad en mantener a la residencia libre de contagios pero también son fundamentales los trabajadores que se quedan en guardia y cuarentena en sus casas para poder relevarnos”, añadió Moreno. 

En la residencia cuentan ahora mismo con una terapeuta, dos enfermeras, la directora y 18 auxiliares, además de la imprescindible ayuda de la Comunidad de Hijas de la Caridad que allí reside. “Juntos estamos trabajando con la prioridad de garantizar la salud de los residentes y trabajadores pero también dar la mejor atención posible para que los residentes vivan el duro aislamiento de sus familias de la mejor manera posible, recibiendo mucho ánimo y cariño de todos los trabajadores que se están volcando con pasión en su trabajo”, concluye la directora.