En colegios y cuadrillas
La Navidad es época de paz, de alegría y también de recibir regalos. ¿Quién no ha escrito ya su carta a los Reyes Magos? ¿Quién no ha pasado por delante de un escaparate y ha pensado en “pedir” alguna de las cosas que allí se exhibían? La ilusión se sigue manteniendo, pero lo que ha cambiado con el paso del tiempo son las formas de regalar.
En la actualidad, cada vez son más los que optan por las nuevas formas de sorprender en estas fechas a los suyos, y la que más triunfa es el amigo invisible. ¿Quién no ha jugado alguna vez a este divertido juego en el que el azar escoge a la persona a la que uno va a regalar? Puede llegar a ser bastante divertido y sólo hace falta un poco de imaginación. La técnica es muy fácil: una vez que se encuentra reunido el grupo, se escribe el nombre de cada uno de los presentes en unos papeles. Después se mezclan en una bolsa o cualquier otro recipiente y cada uno de los implicados extrae una papeleta. Así, cada uno regalará a la persona cuyo nombre aparece escrito en la pepeleta manteniendo el secreto ante los demás.
Esta técnica para regalar, que se puso de moda hace unos años, causa furor en los colegios y las cuadrillas de jóvenes. Ahora bien, esta es la forma, pero hay muchas modalidades de llevarlo a cabo.
Una de ellas depende del precio del regalo que se va a adquirir. “Varía mucho de unos grupos a otros. Si lo hacen críos suelen tener un tope de tres a cinco euros, mientras que los que son más mayores ya ponen cantidades que les permiten hacer obsequios un poco mejores”, señala Pilar Fernández, de la tienda Actual de Tudela.
No sólo entre los jóvenes
Una vez que se tiene el precio establecido, llega lo más difícil: encontrar el regalo adecuado. Desde esa cosa que necesita o de la que se ha encaprichado nuestro amigo, a aquella otra que uno cree que le puede gustar o hacer ilusión. También hay quienes deciden hacerlos de forma manual, lo que le da un toque más personal al juego. “Se llevan mucha bisutería, adornos, peluches.. pero todo depende del dinero que hayan establecido como tope”, comenta Fernández.
También están los que optan por hacer el Amigo Invisible de broma, triunfando en este caso los obsequios que hacen referencia a alguna anécdota protagonizada por la persona que lo va a recibir o simplemente algún objeto que asegure la risa en el momento de ser descubierto. “Se venden muchos regalos eróticos, tanto para chicas como para chicos”, explica Mª Carmen Buñuel, de Aderezzo.
Además, hay muchos que durante el periodo de tiempo en el que se realiza el juego, dejan pistas al destinatario de su regalo para que descubra su identidad, como son pequeñas notas o, incluso, pequeños obsequios. Todo de pende de la imaginación de los que lo realicen.
Lo que comenzó siendo una moda de jóvenes, se ha ido haciendo hueco entre los más maduritos. “Cada vez las familias son más numerosas y optan por hacer un buen regalo a un sólo familiar en vez de comprar un pequeño detalle a cada uno. Y la mejor forma de hacerlo es preparar el Amigo Invisible”, señalan desde Actual.
Finalmente, la entrega de los regalos se suele hacer durante el transcurso de una cena o reunión en la que se puede descubrir el enigma que ha rodeado el juego o bien mantener el misterio y dejar que cada uno disfrute tratando de averiguar quién ha sido su Amigo Invisible
