El sol brilla con fuerza en la Ribera.
Se acercan ya las doce, la campana
a punto está de dar la hora cercana.
Vestida está de luz la plaza entera
La calle de alegría se engalana.
De risas y colores se envolviera
todo aquel visitante que viniera
a disfrutar las fiestas de Santa Ana.
Nuestra ciudad es flor que da cobijo
a quien quiere vivir esta experiencia
con empatía, paz y regocijo.
Tudela es lugar de confluencia.
El de aquí y el de fuera, son el hijo
que acoge sin ninguna diferencia.
Milagros Rubio