La Paz no es una tregua
que imponen por mandato,
con armas y ejércitos,
los más fuertes estados.
La Paz no es la teoría
que exponen los letrados,
políticos ocultos,
desde altos estrados.
Ni es la concesión
de los adinerados
a bajos intereses...
La Paz la siguen dando
aquellos que caminan
con humildad, amando.