Queridos niños :
¿Qué tal estáis ?. Ya sabemos que no es habitual pero, por una vez, vamos a ser nosotros, el Olentzero y los Reyes Magos, los que os escribimos una carta a vosotros, los niños. Queremos deciros, en primer lugar, que ya hemos recibido todas vuestras peticiones y que las hemos ordenado por localidades destacando a aquellos y aquellas que mejor se han portado este año, para llevarles todo lo que han solicitado.
Pero nuestra carta no es solamente para deciros cosas buenas, nosotros también tenemos una serie de peticiones para vosotros.
En primer lugar, « un poquito de por favor ». Y, aunque ya parezca una frase hecha, lo que queremos es precisamente eso, un poquito de por favor, una miaja de educación. No os pedimos que escribáis las cartas de vuestros abuelos y padres, con todo eso de «queridos Reyes Magos u Olentzero, cómo estáis, si tenéis a bien y os pilla de paso, os agradeceríamos, por favor..…., etc. etc. », pero podíais al menos pedir por favor y dar las gracias.
Es que hay alguno que se contenta con mandarnos un correo electrónico en el que solamente pone « Quiero : » en el Asunto, y la lista de regalos en el Texto. Hubo uno incluso que nos amenazó con su abogado por incumplimiento de contrato publicitario si no le traíamos todo lo que había pedido. Vamos a ser todos un poquito educados.
Pensad también en los regalos que pedís, que muchos de vosotros creéis que cuanto más grande mejor, y que nosotros, sobre todo los Reyes Magos, ya vamos para mayores (tenemos más de 2000 años) y el médico nos recomienda que no carguemos pesos. Que sí, que tenemos la ayuda de los camellos, en el caso de los Reyes, y del burro, en el caso del Olentzero, pero a veces la carga es demasiado pesada.
Y vale que una Navidad en torno al hogar es más hermosa, vale que el fogón ambienta mucho el comedor…, pero tened en cuenta que entramos por la chimenea y cuando os vayáis a la cama apagad el fuego, que tenemos ya el trasero como un tomate.
Otra cosita, a ver si depuramos un poquito el tema de lo que nos dejáis para comer. El Olentzero aún tiene algo de suerte porque llega en Nochebuena, pero nosotros los Reyes, que pasamos al final de las Navidades, sólo encontramos los guirlaches y el turrón del duro. Sí, sí, esos que les regalan en el aguinaldo a vuestros padres y que no se come ni el abuelo, con todo el hambre que pasó en la guerra. ¡Que también nos gustan el jamón de jabugo y los langostinos !. ¡Ah !, y qué decir de la bebida ; ¿es que nadie sabe que tenemos que conducir durante miles y miles de kilómetros ?. ¡A quién se le ocurre ponernos bebidas alcohólicas !. Menos patxarán y más bebidas isotónicas para nosotros, el burro y los camellos.
Bueno, por este año ya vale de peticiones. A ver si para el año que viene conseguimos ya un Convenio en condiciones. Esperamos que todos y todas seáis muy felices y recordéis siempre que hay muchos niños que no tienen tanta suerte como vosotros y que el mejor juguete son siempre papá, mamá, los hermanos y los amigos.
Besos a todos y ya sabéis, pronto a dormir que si no no entramos en vuestra casa. Melchor, Gaspar, Baltasar y Olentzero.
