“Como un año desaprovechado en lo fundamental”. Así califican desde el PSN los primeros doce meses de legislatura de los regionalistas en Tudela. Un “suspenso” motivado por “la falta de empuje, capacidad de gestión, liderazgo y no saber qué necesita Tudela al vivir de la inercia del pasado”, afirmó Manuel Campillo, portavoz del grupo, quien calificó la gestión del grupo municipal como “populista”. “Está más centrada en actos populares que en la gestión seria de los problemas de Tudela, como puede ser la política de subvenciones”, recalcó Campillo.
Entre las cuestiones que continúan sin solución en la ciudad se refirió a proyectos urbanísticos como el Gaztambide, las piscinas de verano, la plaza Nueva, la Champiñonera y el mantenimiento de las calles, entre otros; así como a los asuntos presupuestarios que, a su juicio, “adolecen de los mismos defectos que el año pasado, pero con el agravante de que este año no hay presupuestos participativos”.
Ante esta situación, desde el PSN se muestran dispuestos a acordar y consensuar con los regionalistas las grandes decisiones que afectan a la ciudad, al mismo tiempo que recuerdan su implicación en la resolución de temas como la devolución de parte de la contribución de 2005.
