Satisfacción y éxito de convocatoria. Esas fueron las impresiones que se llevaron los organizadores de la 'quedada' para descender a nado desde Tudela hasta El Bocal, una iniciativa promovida por varios deportistas tudelanos como los hermanos Javier y Roberto Val o Alberto Cebollada y que vivió su segunda edición el pasado domingo.
Con el embarcadero Merche Marín como punto de encuentro, la actividad se desarrolló sin incidentes y con total normalidad. Una treintena de nadadores de diferentes clubes (Calahorra, Arenas
y Clara Campoamor, entre otros) se lanzó al agua, que presentaba una temperatura de alrededor de 17 grados. Casi todos los participantes completaron los cerca de 6.000 metros de recorrido y, una vez en el punto de llegada, compartireron sus impresiones acerca de esta prueba no competitiva.
Posibilidad de patrocinio
Javier Val, uno de los promotores de la actividad, señaló que "lo ideal sería encontrar una empresa que se encargase de llevar a cabo el descenso de forma más organizada", con sus correspondientes inscripciones y seguros de responsabilidad civil.
"Es una ilusión que tenemos desde hace tiempo y ojalá que pueda ocurrir pronto", añadió, agradeciendo la colaboración de los palistas del EbroKayak, que acompañaron a los nadadores. "Todos acabamos muy contentos y emocionados con el resultado final", sentenció.
