El cuerpo de Policía Local de Tudela ha dicho basta. El desalojo de la sede de la comisaría debido a la crecida del Ebro ha sido la gota que ha colmado el vaso para mostrar públicamente unas quejas y demandas que van más allá de la contención del agua del río que pasa por Tudela. Denuncian que la sede está “dejada y anticuada” y emplazan al consistorio a dedicar más medios para el cuerpo y a aumentar el número de efectivos, ya que el actual impide incluso que se cumplan algunos de los puntos de la recientemente estrenada Carta de Servicios.
La búsqueda de una nueva sede es la principal reclamación de los miembros del cuerpo en la capital ribera. La comisaría de El Molinar, junto al Ebro, no sólo es víctima de las esporádicas crecidas, sino también de la “falta de atención de Ayuntamiento”. “Está totalmente dejada. El mobiliario es viejo, hay ordenadores que se han quedado anticuados y los tenemos sin usar, los vestuarios están mal distribuidos y las chicas de la comisaría no tienen su propia ducha... son muchas cosas. En 17 años no se ha invertido un duro y queremos un lugar digno para trabajar”, aseguró Alberto Buñuel, miembro del cuerpo desde 1.988.
"En 17 años no se ha invertido un duro en la sede de la Policía Local"
Alberto Buñuel
Policía Local de Tudela
La policía mostró además su preocupación al ver que “ningún edificio actual en Tudela” tiene visos de poder convertirse en la nueva sede, por lo que “el consistorio debería construir una nueva”.
Pocos efectivos
El número de efectivos es otra de las demandas del cuerpo. Actualmente cuenta con 52 agentes, de los que casi la mitad (21) no están capacitados para hacer trabajo de calle. “Esto hace que en muchas ocasiones se incumplan los mínimos de cuatro agentes patrullando que marca la Carta de Servicios”, afirman.
La falta de nuevos efectivos repercute también en un cuerpo en el que “la media de edad está ascendiendo paulatinamente”. “Le proponemos al Ayuntamiento que agilizase las convocatorias de nuevas plazas, cada cuatro años por ejemplo, para evitar que muchos agentes lleguen a la vez a la jubilación”, señaló Buñuel.
Las plazas vacantes en la actualidad son 16 y la última remesa de nuevos agentes, en concreto 7, entró en 2011. “El trabajo aumenta sobremanera pero no el número de trabajadores. Hoy en día tenemos muchas más competencias que hace 15 ó 20 años pero no se aumentan plazas”, señalaron, a la vez que agradecieron el apoyo de los ciudadanos en sus reivindicaciones.
