Tudela

Optimismo sobre el tratamiento de la diabetes tipo 1

Las investigaciones más recientes sobre el tratamiento curativo de la diabetes mellitus tipo 1 permiten un moderado optimismo para pacientes y especialistas, según se recoge en el último número de la revista "Anales del Sistema Sanitario de Navarra" (Vol 31, nº 3 2008), publicación cuatrimestral que edita el Departamento de Salud y que ha sido incluida en el “Repositorio Español de Ciencia y Tecnología”. El volumen, correspondiente a septiembre-diciembre de 2008, dedica su editorial y la colaboración especial de la revista a esta enfermedad, que tiene lugar como consecuencia de una destrucción autoinmune de las células beta presentes en los islotes de Langerhans del páncreas.

María José Goñi Iriarte, del Servicio de Endocrinología del Hospital de Navarra, señala en el editorial que, a pesar de la evolución farmacológica de la insulina desde su descubrimiento en 1921 y las terapias intensivas actuales basadas en la administración de dosis múltiples, “no puede evitarse la aparición de complicaciones (retinopatía, nefropatía, neuropatía y enfermedad cardiovascular) derivadas de un control insuficiente y no fisiológico de la hiperglucemia” y añade que “el intento de optimización del control conlleva el riesgo de hipoglucemia recurrente”

Goñi Iriarte indica que desde hace varias décadas gran parte de los esfuerzos en la investigación en diabetes van dirigidos a alcanzar la curación de esta enfermedad y que, en este sentido, se han desarrollado distintas líneas de investigación en terapia celular e inmunoterapia que han llevado a plantear dos opciones de tratamiento no excluyentes: sustituir las células pancreáticas dañadas por células funcionantes (que produzcan y segreguen insulina en respuesta al estímulo de la glucosa) y restablecer la tolerancia inmunológica a los autoantígenos pancreáticos (aporte exógeno).

El artículo recoge que el principal determinante de los riesgos de complicaciones derivadas de la diabetes mellitus tipo 1 (DM1) se debe a los altos niveles de glucosa en sangre mantenidos durante largo tiempo, por lo que para conseguir un beneficio terapéutico es necesario desarrollar tratamientos que permitan de manera segura, efectiva y estable mantener la normoglucemia. Según señalan estos especialistas, el tratamiento mediante el aporte externo de insulina no es capaz de conseguir niveles estables de glucosa en sangre y, hasta la fecha, la única solución para restablecerlos de manera permanente se consigue, añaden, mediante el trasplante de páncreas o de islotes pancreáticos. Sin embargo, también indican que a medida que se incrementa el número de centros especializados en el trasplante de islotes, mayor es la necesidad de islotes para su trasplante.