Cuando se habla de los ‘cuartos’, a todos nos vienen a la cabeza esos pequeños locales que los jóvenes tudelanos alquilan, casi exclusivamente para la semana de Santa Ana, a precios desorbitados, y donde estas cuadrillas pasan buena parte del día. Sin embargo, al igual que ocurre con otros muchos vocablos típicos de la capital ribera, la palabra ‘cuarto’ tan sólo se emplea, para definir a estos característicos locales, en Tudela.
Generalmente, la expresión más común o más repetida, para hablar de estos lugares de reunión en otros municipios es ‘peña’ ya que, con esta palabra se designa también al grupo de amigos que ha alquilado o que, en su caso, posee el local. Podría decirse que este es el término comodín ya que, con toda probabilidad si se pregunta en fiestas de cualquier pueblo o ciudad por una ‘peña’, la gente sabrá a qué nos estamos refiriendo.
Los terrizos
En cambio, hay otras muchas localidades del país en las que, al igual que ocurre en Tudela, se han acuñado otro tipo de términos para referirse a los ‘cuartos’. Así, por ejemplo, en Pamplona está muy extendido el término ‘bajera’, mientras que en municipios de la zona de Tierra Estella, como Los Arcos, Mendavia o Lodosa, entre otros, se utiliza más la expresión ‘txamizo’ que, por otro lado, también se emplea en muchos municipios de la provincia de Burgos.
Por su parte, en la zona de la Navarra Media, que engloba a localidades como Tafalla u Olite, los jóvenes suelen llamar a estos locales ‘piperos’, una palabra que viene de los antiguos toneles o pipas, en los que se guardaba el vino y en torno a los que, habitualmente, los grupos de amigos se reunían para disfrutar de un buen rato.
También muy relacionado con el vino existe otro término para denominar a los ‘cuartos’ de fiestas, se trata del ‘terrizo’, una palabra que se emplea, por ejemplo, en la localidad soriana de Ólvega. “Se supone que las fiestas giraban antaño en nuestros pueblos en torno al vino y, especialmente, al vino que denominamos de terrizo y que se hacía en una vasija de cerámica o barro cocido, de entre 50 y 100 litros de capacidad, llamada terriza. Lo que solía hacerse era mezclar el vino con azúcar, incluso canela en algunos casos, añadirle trozos de melocotón y dejarlo reposar y esto era lo que se bebía en fiestas, por ello, al recinto donde se reúnen las peñas se le denominan también terrizo”, explica el alcalde de Ólvega, Gerardo Martínez.
