Listos para fiestas
En los últimos años, el Ayuntamiento de Tudela ha decidido acometer distintas obras de mejora en los corrales de la ciudad. La mayor parte de estos trabajos se realizaron el pasado año en una primera fase, en la que se acondicionaron y renovaron las estancias de los toros, que ya comenzaron a utilizarse durante las pasadas fiestas de Santa Ana. Sin embargo, todavía restan algunas zonas por reformar, que se están ejecutando durante estos días.
En concreto, en esta segunda fase de las obras, que se inició a mediados del mes de junio tras su adjudicación, se van a reformar las dependencias para el personal. Según explica el concejal de festejos, Fernando Inaga, “nos faltaría por arreglar un despacho para la Policía Foral y los veterinarios que tienen que ir a los corrales, también una habitación para guardar el pienso de los toros y otra, con un baño, para los mayorales. De esta forma, podrían quedarse allí por la noche, lo que nos evitaría tener que contratar un guarda jurado para que vigile los corrales”.
En principio, estas obras se adjudicaron por un presupusto cercano a los 22.000 euros, y según indica el edil de festejos, “tienen que estar entregadas el 15 de julio, así que, para fiestas deberían estar. De hecho yo voy a estar muy encima de las obras para que estén terminadas en ese plazo de tiempo”.
Ver a los toros
Por otro lado, lo que aún no se ha concretado es si, en un futuro, el Consistorio decidirá cubrir estas instalaciones para aprovecharlas durante el resto del año. En este sentido, Inaga apunta que “la idea sí que la tenemos pero hay que estudiarla bien porque en esa zona no se permite edificar hacia arriba y tendríamos que buscar otra solución. Aunque lo ideal sería poderlo cerrar de alguna manera y que durante el año la brigada lo utilizase como almacén e incluso el propio vallado del encierro podría guardarse allí.
Ver a los toros
Por su parte, el Ayuntamiento intentará este año poner en marcha una iniciativa que, las pasadas fiestas, tuvo que descartar por problemas de seguridad. Se trata de permitir que la gente acceda al interior de los corrales en grupos reducidos de unas 15 personas para poder ver a los toros de las corridas durante 10 ó 29 minutos. Una idea que el edil de festejos ve más factible para estas fiestas de Santa Ana, “aunque aún no podemos asegurarlo del todo”, subraya Inaga
