Tudela

Las fiestas sin José Mary

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Disfrutar la calle

En estas fiestas se va a echar de menos a una persona como él, entregada “en cuerpo y alma a la organización de la barraca, a los turnos... -cuenta su compañera de partido Milagros Rubio-. A él le gustaba trabajar allí y, además, estaba al tanto de todo lo que hacía falta... Porque uno de los rasgos de José Mary, era la servicialidad”.

José Mary era una persona muy tudelana, y le gustaba el ambiente de calle. “Participa-ba en lo que podía -recuerda Milagros- y le encantaba ver la alegría en su conjunto, los almuerzos, patear la calles del Caso Viejo... Y siempre en familia, con Lola y los suyos. Y desde luego, nunca iba a los toros, no le gustaban”.

“José Mary saboreaba las pequeñas cosas. En ese sentido era como un niño grande, siempre dispuesto a descubrir cosas nuevas. Era de sonrisa fácil y disfrutaba mucho de las fiestas. Y le encantaba ver el disfrute de los demás. El año que pusieron la feria en el paseo del Queiles, cerca de su casa, aparte de las molestias que pudiera sufrir, como todos los vecinos, le encantaba pasar por allí y ver a toda la chavalería pasandolo en grande. Le sacaba chispas a todo”.

Han sido emocionantes, por sinceros y numerosos, los homenajes, comentarios, cartas, que desde el cariño tantas personas han dedicado a José Mary Lacarra. Siempre suelen decirse cosas buenas de las personas que nos dejan, pero ésta es una de esas pocas ocasiones en las que todas estas buenas palabras, no sólo hacen justicia a la persona, sino que, seguramente, se quedan cortas.