Alfaro ha vuelto a presentarse durante este fin de semana como un destino turístico con apetecibles y variadas ofertas, desde su patrimonio natural y artístico hasta la rica gastronomía. La celebración del III Día de la Cigüeña contagió de un ambiente festivo las calles alfareñas desde la tardenoche del viernes, momento en el que decenas de cuadrillas de todas las edades se lanzaban a conocer, recorrer y saborear la ruta de pinchos inspirados en las zancudas.
“Me das el pincho de las cigüeñas”, era la petición de todos los que entraban a los catorce bares participantes en esta ruta gastronómica, junto a los menús especiales elaborados por dos restaurantes. Esta ruta fue la cita para la cena o comida de cientos de alfareños y visitantes, que recorrieron las calles y sus barras compartiendo pinchos bautizados como ‘Capacito de cigüeña’, ‘Nido de codorniz’, ‘Patolito’… Como en otras ocasiones, esta iniciativa resultó un éxito y atrajo tanto a los alfareños como a decenas de visitantes.
A la par, los actos organizados desde el Ayuntamiento invitaron a conocer los tesoros patrimoniales de Alfaro: visitas guiadas al Mirador de las Cigüeñas sobre la Colegiata de San Miguel y al Centro de Interpretación de los Sotos del Ebro. Junto a estas visitas, Cruz Roja Juventud organizó talleres de juegos tradicionales y los colegios una exposición de dibujos infantiles con las zancudas como protagonistas.
La otra cita principal de este fin de semana, que parte del refrán ‘Por San Blas la cigüeña verás’, fue la bendición y el reparto del rosco gigante en el mediodía del domingo en la plaza de España. Los roscos son una tradición en Alfaro por estas fechas, y cientos de personas saborearon el gigante repartido en la plaza, iniciando el ambiente en la mañana dominical.
