Representantes de las 21 asociaciones de jubilados con que cuenta la Ribera se dieron cita en Tudela para reivindicar la necesidad de la implantación de una unidad geriátrica en el hospital Reina Sofía de la capital ribera. Su representante en el Consejo Navarro de Personas Mayores, Alberto Ariz, fue el encagado de darles a conocer el contenido del informe que será presentado al departamento de Salud y en el que se pide que su instalación sea inmediata.
Tras recordar que la comunidad foral se encuentra inmersa “en un rápido proceso de envejecimiento” y cifrar en 105.760 las personas mayores que hay en la provincia (lo que supone el 17,48% del total de la población), Ariz cifró en 400.000 euros la cuatía destinada en los presupuestos de Navarra de 2009 para su creación.
Del mismo modo, reclamó una estrecha relación entre Asiencia Primaria y Geriatría para que exista una comunicación científica, preventiva y asistencial entre ambas especialidades, ya que “el primer encuentro entre médico y anciano se produce en atención primaria y este médico es el que realiza la primera valoración”.
Ariz también se refirió a la psicogeriatría, para la que pidió 10 camas. “Podrían ser concertadas con la Misericordia o, si no, habría que buscar otro centro de día que pudiera tener temporalmente a estos enfermos”, comentó el representante ribero. Se da la circunstancia de que Ariz asistió, hace unas semanas, a una Comisión de Salud en el Parlamento navarro en la que explicó las necesidades con que cuenta la Ribera a este respecto, al mismo tiempo que dio a conocer cómo, a su juicio, debería ser esta unidad.
