El pasado lunes, miles de personas en todo el mundo celebraron el Día Internacional del Trabajador, una jornada que en Navarra contó con 2 celebraciones principales, pero un único lema, “Por la paz. Empleo estable en Igualdad y no a la siniestralidad”.
Concentración en Tudela
Así pues, mientras UGT eligió la localidad de Viana como escenario de los actos conmemorativos del 1 de mayo que respaldaron unas 2.000 personas, CCOO reunió a otras 1500 en Pamplona. En una edición del 1 de mayo que ha venido a coincidir con el 75 aniversario de la II República y el 30 del I Congreso de UGT tras salir de la clandestinidad, los dos sindicatos mayoritarios apostaron por poner fin a la precariedad laboral y a la temporalidad, e incidieron en otros aspectos igual de importantes como la ley de atención a las personas dependientes y la igualdad entre hombres y mujeres. De igual forma, alarmaron sobre la situación de la industria navarra que, en un año, ha perdido 3.050 empleos, según los sindicatos.
Por su parte, el sindicato ESK convocó una manifestación en Tudela con el lema “Por la reindustrialización de la Ribera”, ya que este aspecto se encuentra entre las tres preocupaciones resaltadas por ESK con motivo del 1 de mayo. Las otras dos, las libertades básicas sindicales y la importancia de la colaboración entre sindicatos. ESK hizo una doble crítica a las empresas navarras y a la administración pública, por “sumarse de alguna manera a la deslocalización industrial”.
