La Presidenta de
Navarra, Yolanda Barcina, ha explicado este jueves ante los
representantes de veinticinco
empresas los objetivos
generales de la reforma
tributaria que prepara el
Gobierno de Navarra.
Barcina ha insistido en la
necesidad de diseñar un mapa
tributario “acorde" con la actual
coyuntura socioeconómica y
que sirva como "catalizador" para la recuperación del consumo de los
ciudadanos y de la actividad empresarial. La Presidenta ha explicado que
el objetivo del Gobierno de Navarra es “que aumente la recaudación
tributaria gracias a la reactivación de la actividad económica” y que, para
ello, “sería positivo reducir la actual carga impositiva”.
Según el calendario que se ha presentado a los empresarios, la
reforma fiscal será diseñada y presentada durante el primer semestre del
año. Dentro de este cronograma, se incluye el actual proceso de
participación pública. La Presidenta ha explicado que este proceso está
abierto a todos los ciudadanos y, “especialmente, a los principales
agentes sociales y económicos”, entre los que se incluyen las empresas
presentes en la reunión. Anteriormente también se ha cursado invitación
para participar a los miembros del Consejo Económico y Social de
Navarra, a los del Consejo Navarro del Trabajo Autónomo y a diferentes
organizaciones empresariales.
El propósito de abrir la
reforma a la participación es
que el resultado sea “lo más
consensuado posible” para
que el nuevo sistema tributario
se pueda mantener estable
durante los próximos años.
En sus intervenciones, los representantes de las
empresas han considerado “positiva" la oportunidad de realizar
aportaciones a una reforma que, creen, "es fundamental que
genere un marco fiscal estable que sirva para las actuales
empresas y las que puedan llegar en el futuro”.
Objetivos concretos
En cuanto al IRPF se revisarán las cuantías de los tipos máximos. En este sentido, habrá que tener
en cuenta el resultado de la reforma fiscal que promueve el Gobierno central, ya que deberá existir una
correcta proporción entre la imposición directa y la indirecta, fundamentalmente el IVA. Además se
propone una revisión del actual sistema de módulos para aproximar la contribución al rendimiento real de
los trabajadores autónomos.
Por otro lado, el proceso de reforma fiscal estudiará también una posible modificación del Impuesto
de Patrimonio. Y en lo que tiene que ver directamente con las empresas, se van a revisar los actuales
tipos del Impuesto de Sociedades y se estudia establecer un suelo tributario en función de los beneficios
obtenidos.
Además, se propone analizar la validez de las actuales deducciones e incentivos fiscales con el fin
de que realmente sirvan para el objetivo para el que fueron puestos en marcha. Actualmente los
beneficios fiscales suponen más de 1.361 millones de euros, aunque más de la mitad son consecuencia
de las exenciones de IVA, impuesto que Navarra debe aplicar de la misma manera que en las
comunidades de régimen común.
Representantes de empresas
Además de los miembros del Gobierno de Navarra, a la reunión han asistido representantes de las empresas más importantes de la Comunidad Foral, entre los que se encontraba el ribero Antonio Ullate, de Mecacontrol.