Previsiblemente, antes del verano la Mancomunidad de Residuos Sólidos de la Ribera iniciará la recogida de los llamados “residuos peligrosos del hogar” tales como el aceite de cocina, otros aceites minerales, lejías, disolventes, pinturas, medicamentos e incluso pequeños electrodomésticos y baterías. Para ello, en los presupuestos de 2006 de la entidad se ha incluído una partida de 90.000 euros que se destinará a la compra de un camión de recogida, denominado punto limpio móvil. Este vehículo se desplazará por todos los municipios de la mancomunidad, en días y horas determinadas, para recoger todos estos residuos de entre los que el aceite de cocina es uno de los tóxicos. De cara a su recogida se prevé también el reparto por los domicilios de garrafas de 5 litros donde se verterá el aceite usado que luego se llevará el camión, a la par que los otros residuos que irán compartimentados en sus respectivos contendedores.
Para poder poner en marcha este nuevo servicio es imprescindible que la planta de biometanización esté en pleno rendimiento, ya que residuos como el aceite de cocina deben ser tratados en instalaciones de este tipo, donde primero son fermentados y convertidos en biogas, y posteriormente en electricidad. Hasta ahora, sólo se recogía el aceite procedente de bares y restaurantes pero lo hacían gestores particulares autorizados, no la Mancomunidad.
A finales de enero podrían iniciarse las primeras pruebas en la planta de Tudela para que comience a funcionar antes de julio.
