Tudela

La ‘fragilidad’ afecta alrededor del 10% de los mayores de 65 años

La fragilidad física es un problema que afecta aproximadamente al 10% de los mayores de 65 años. Se caracteriza por disminuir la fuerza, la resistencia y la función fisiológica. Pese a ello, se ha demostrado que se puede prevenir e incluso revertir este estado practicando ejercicio físico o con una nutrición adecuada para las personas mayores.

Mientras el deterioro físico sigue siendo el principal componente de la fragilidad, nuevos estudios indican que otras dimensiones como la cognitiva, psicológica o lo social pueden contribuir en el desarrollo de esta condición.

Este deterioro viene acompañado con el descenso de funciones intelectuales tan básicas como el pensamiento, los recuerdos, la planificación o el razonamiento.  Aunque todo dependerá del grado en el que se encuentre, ya que no es lo mismo tener olvidos ocasionales, que otros grados más severos y debilitantes como sería la demencia.

El doctor Vincenzo Malafarina, geriatra de la Clinica los Manzanos de Logroño y experto sobre el tema, aclara que “la fragilidad podría ser considerada como un estado de prediscapacidad y, por lo tanto, si consiguiésemos diagnosticarla precozmente y tratarla de forma eficaz conseguiríamos menores costes en sanidad y mejor calidad de vida de las personas ancianas”.