Campaña marcada por la crisis
El campo aragonés está inmerso en la época de recolección de frutas y verduras. Tras un invierno templado y una muy buena primavera se espera una gran cosecha que hará llegar hasta nuestro territorio entre 12.000 y 14.000 temporeros. Trabajadores a tiempo parcial que pasarán la temporada de recogida en Aragón para después volver a sus lugares de origen.
En cuanto a la estimación final dependerá, fundamentalmente, “del precio que se otorgue al producto”, manifiesta Antonio Ranera, responsable del Departamento de Migraciones de UGT Aragón, porque "si es muy bajo igual merece la pena no recogerla”, apostilla. Sin embargo, hasta el último momento no se podrá certificar si se trata de una campaña normal -que atraería en torno a los 12.000- o una muy buena campaña, tal y como prevé UAGA, que sumaría a las cifras de años anteriores unos dos mil temporeros llegando a un total de 14.000.
Extranjeros y con contrato
Esta campaña será la tercera que se encuadre en la actual crisis económica, puesto que a nivel nacional los problemas arrancaron un año antes que en Aragón. Fuera de lo que pudiera parecer, el período de crisis no ha variado prácticamente un ápice el perfil de los trabajadores que llegan hasta los campos aragoneses. “Hace dos años dijimos que por la crisis habría más temporeros españoles y finalmente no ha pasado”, reconoce Ranera.
Y es que, tal y como ha comentado el sindicalista “cada vez hay más prestaciones de subsidio”, de manera que aunque el número de parados aumenta no repercute en la necesidad de buscar trabajo a corto plazo. De esta manera, Ranera reconoce que “son pocos” los autónomos que han tenido que incorporarse al campo tras la pérdida de su empleo.
No obstante, en Aragón las consecuencias de esta crisis llegan con un año de retraso y desde la UGT no se descarta que en futuras campañas pueda cambiar el escenario. “Nosotros tenemos un 18% de paro, mientras que en Andalucía superan el 22% y ellos sí han visto que el perfil del temporero variaba”, ha advertido Ranera.
Salarios por convenio
Actualmente la mayor parte de los temporeros que trabajan en las campañas de recolectas en Aragón llegan allende las fronteras españolas. Desde UGT no confirman los datos al no ser oficiales, pero podría rondar el 90%. Una tendencia que ha sufrido una pequeña variación en los últimos años. “Hace cuatro años teníamos un 98% de extranjeros”, asevera el responsable del sindicato.
En cuanto a los contratos, la mayoría firma un contrato de obra y servicio que finaliza una vez acabada la temporada. De hecho, hay ocasiones en que ni siquiera está en papel puesto que “no es necesario según el régimen especial agrario”, apostilla Anotnio Ranera, incidiendo en que los empresarios “tan solo deben dar de alta y de baja en la Seguridad Social”.
La presencia de ilegales ha disminuido notablemente en los últimos años por varios motivos, destacando entre ellos que la recogida de frutas o verduras “suponía una puerta de entrada para los extranjeros” de manera que “utilizaban la agricultura para llegar a España y, posteriormente, cambiar de sector”, especifica Ranera.
Asimismo, la proliferación de otros sectores provocó en 2008 una escasez de mano de obra legal, por lo que los empresarios se vieron prácticamente obligados a que todos los contratos fuesen en estas condiciones. De esta manera, “se ha ido generando una voluntad del empresario por tener temporeros legales”, ha asegurado el responsable sindical.
Respecto a los salarios, los problemas financieros no han supuesto una disminución en lo que los temporeros reciben porque “se paga por convenio”, informa Antonio Ranera. De esta manera, todos aquéllos empresarios que cumplen con la normativa vigente no han podido reducir los costes con sus asalariados.
Otro asunto es de los empresarios 'piratas'. “Sí nos consta que hay empresarios que pagan por debajo del convenio”, reconoce el sindicalista, si bien es una situación que se antoja complicada poder controlar.
