Tudela

Jugar con la luz

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La iluminación es el punto final de la decoración. Así lo afirma José Carlos Fron desde Iluminarium. Una aseveración que pone de manifiesto el auge que en los últimos años ha experimentado uno de los ámbitos de la decoración al que, hasta hace muy poco, no se le prestaba la atención debida. “Antes se ponía una lámpara y era para todo. Ahora, con todas las posibilidades que ofrece la iluminación, se crean zonas que marcan lo que es la vivienda. Para ello, se puede jugar con luces cálidas, frías...”, explica Marta Rubio, decoradora de Elektra Iluminación.

Modas y tendencias

Y es que los muebles son el principal factor condicionante a la hora de elegir un tipo u otro de iluminación para el hogar. “Es lo que marca. La gente quiere que le quede bien con lo que ya tiene debido a que la iluminación es muy importante para resaltar un mueble o determinados aspectos del mismo”, comenta Fron.

Al igual que la moda, la iluminación sigue una serie de tendencias en las que ahora se impone el uso del blanco y el negro, las pantallas circulares de gran o pequeño formato, así como la madera color wengue. “A la hora de apliques, luces directas e indirectas la tendencia es muy minimalista”, señala Marta Rubio. Desde Iluminarium destacan las tulipas de cristal con barras en cromo y níquel satinado. “Lo que más se lleva y lo que más se pide es lo moderno, aunque también se lleva el neoclásico, que suelen ser lámparas de plato con cuatro tulipas”, apunta José Carlos Fron.

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Además de las modas y el presupuesto -en el mercado existe un abanico tan amplio de modelos como de precios-, si hay que tener algo en cuenta a la hora de escoger la iluminación, es el uso que se le va a dar a la habitación. Así, Conchi Blanco, desde Casmar, nos proponen una serie de ideas para equipar todo el hogar. Para las cocinas, se decanta por el bajo consumo con fluorescentes en líneas modernas. En lo que respecta al recibidor, opta por un foco halógeno; mientras que para el salón distingue entre la zona de comedor, con una lámpara colgante encima de la mesa, y la zona de estar, con elementos más cortos y planos, y lámparas de sobremesa de luces indirectas. Para el dormitorio da “barra libre, al ser un tipo de habitación en la que encaja cualquier cosa”. “No existen reglas fijas. Aunque hay modas, hay veces que la gente no sigue una tendencia concreta y se centra en otros aspectos como la limpieza, o la calidez, que se puede conseguir a través de lámparas de tela en contrapunto a la frialdad de los metales”, concluyó Blanco