Fitero

Idiomas, una necesidad y un placer

1158134673.jpg

Nuevas tecnologías

El inglés “es el idioma con más demanda hoy en día, seguido del francés y el alemán, sobre todo por su aspecto empresarial”, asegura la directora de la Escuela Oficial de Idiomas de Tudela, Begoña Sánchez. ¿Pero cual es la razón para animarse a estudiar un idioma? Los profesionales del sector aseguran que los aspectos principales son dos. En primer lugar el profesional, las empresas demandan cada vez más un buen nivel de idiomas a la hora de seleccionar a sus empleados o de promocionarlos. “De hecho, cada vez se piden más cursos de idiomas por parte de las empresas riberas. Además, el abanico de idiomas se ha ampliado muchísmo”, señala Jesús Ángel González, director de ESIC Idiomas en Tudela. En segundo lugar se valora el elemento personal. “El estudio de idiomas es muy recomendable para la gente mayor porque te mantiene la mente activa, incluso aunque haya pasado mucho tiempo desde que lo estudiaban es fácil volver a refrescarlo porque todo se queda en el subconsciente, sólo se necesita un poco de motivación”, comenta Sandra Mesa, de la academia Reward de Castejón. “Los idiomas te amplían las dimensiones de la vida, implican una nueva forma de pensar y se multiplican las impresiones del mundo”, añade la profesora Charo Blanco.

Viajar al extranjero

La revolución que han supuesto las herramientas informáticas y audiovisuales son un gran factor para facilitar el aprendizaje: “A nivel de academia seguimos utilizando los métodos tradicionales para garantizar una base, pero es verdad que internet hoy en día te permite muchas más cosas, como hablar con personas de todo el mundo o acceder a documentos en inglés que de otra manera sería imposible conseguir”, señala Cristina Añón, profesora de Dublin School.

Los “peques”

Aunque los expertos en el tema señalan que no es imprescindible salir de España para aprender un idioma, también advierten que es muy recomendable cuando se quiere conseguir una gran fluidez y un nivel muy alto, además es un gran aliciente comprobar el sentido práctico de lo que has aprendido.

Un colectivo de la población en el que más importancia tienen los idiomas son, sin duda alguna, los niños. Los motivos son la capacidad que se tiene a edades tempranas para este tipo de aprendizaje y, sobre todo, la utilidad que le van a poder dar en el futuro por dos razones: el avance de la globalización en todos los aspectos de la sociedad y también los progresos de la tecnología que facilitará aún más los sistemas de comunicación.


Lo principal para que los más pequeños de la casa estén a gusto aprendiendo un idioma es que su primera toma de contacto sea divertida. “Lo mejor es enseñar jugando, viviendo, mostrándoles a través del idioma que hay más mundo, pero sobre todo con emoción”, destaca Charo Blanco.


Hoy en día, cada vez es más temprana la edad en la que se empieza a estudiar un idioma, los tres, cuatro y cinco años, es lo ideal para comenzar porque “es cuando mejor aprenden la pronunciación, algo que se nos atraganta de mayores”, afirman desde ESIC.