Aunque a las doce del mediodía un cohete se encargó de anunciar que habían dado comienzo las fiestas en honor a la Virgen de la Peña de Fustiñana, no fue hasta las 21.30 horas del sábado cuando tuvo lugar uno de los actos más esperados de esta celebración: el lanzamiento de nueces, un espectáculo que se repitió al día siguiente.
Visita madrileña
Ochocientos cincuenta kilos de este fruto seco fueron arrojados desde los balcones de la casa consistorial por el alcalde, Juan Antonio Sola, y varios ayudantes. Este fue el comienzo de cuatro días de fiesta muy esperados en los que la alegría y las ganas de divertirse se apoderaron de los vecinos de la localidad. “Ha habido una participación muy buena en todos y cada uno de los actos programados, aunque el reparto de nueces y la Salve en honor a la Virgen siguen siendo los actos centrales de las fiestas”, explicó Sola.
Las fiestas de este año han contado con un espectador de excepción, el alcalde de la madrileña localidad de Tielmes, lugar de nacimiento de los santos Justo y Pastor, patrones de la localidad. “Estuvimos allí hace unos meses siguiendo la trayectoria de nuestros patronos y empezamos a entablar relación. En el futuro nos gustaría preparar algunos actos de forma conjunta en honor de los santos “, señaló el alcalde.
