La Fundación Tarazona Monumental ha finalizado su IX Taller de Restauración de Bienes Muebles que ha permitido recuperar siete obras y con el que se contribuye a la conservación del patrimonio de la ciudad.
En esta edición se ha intervenido en dos lienzos de la colección de exvotos del Santuario de la Virgen del Río del siglo XVIII propiedad del Ayuntamiento de Tarazona; en las caras interiores de las puertas del antiguo órgano de la iglesia conventual de San Francisco de Asís; en el alto relieve de la fachada de la iglesia del ex convento de San Francisco de Asís; en la inscripción del relieve de la alegoría a la Prudencia de la fachada de la Casa Consistorial y se ha actuado de urgencia en el facistol mudéjar de la iglesia de Santa María Magdalena.
Los trabajos han sido realizados por la restauradora de la FTM, Nerea Otermin, y por cuatro alumnos, dos de la Escuela de Restauración de Bienes Culturales de Aragón, uno de la Universidad de País Vasco y otro de la Universidad de Valencia, que han estado realizando sus prácticas formativas de fin de grado en el seno de la Fundación.
“La restauración y la protección del patrimonio histórico-artístico de la ciudad es una de las misiones que tiene la Fundación y, gracias a este taller, hemos recuperado a lo largo de esta década un número importante de bienes artísticos que necesitaban ser recuperados”, ha destacado el gerente de la Fundación, Julio Zaldívar.
Y, para involucrar a la ciudadanía y que conozcan el trabajo que se ha llevado a cabo, la FTM ha realizado acciones de educación patrimonial con los centros escolares, talleres de conservación preventiva con los participantes de los campamentos de verano de la Ludoteca municipal y una jornada de puertas abiertas al taller.
Las restauraciones, al detalle
Los dos lienzos pertenecientes a la colección de exvotos del Santuario de la Virgen del Río, de propiedad municipal, representan a niños naturales de Tarazona con dolencias supuestamente curadas por la intercesión de la Virgen del Río, patrona de la ciudad. En ambos casos tuvo que protegerse la policromía para evitar su desprendimiento antes de sustituir los bastidores y tratar el soporte. Tras la limpieza de las capas de barnices superpuestos y suciedad depositada con el paso del tiempo, se procedió a la reintegración de las lagunas y se aplicó un barniz de protección final. Ambos lienzos se exhibirán a partir de ahora en la Casa Consistorial.
Las actuaciones en las puertas interiores del antiguo órgano de la iglesia del ex convento de San Francisco de Asís se han centrado en la sustitución de sus bastidores, la intervención sobre el soporte, la limpieza y reintegración de aquellas zonas que habían perdido la policromía. Tanto la puerta dedicada a Santa Tecla como la dedicada a Santa Cecilia se exhiben hoy en día en el claustro de dicho ex convento, pudiendo ser contemplados tanto por los ciudadanos como por los turistas. Quedan pendientes de restauración las puertas exteriores del órgano dedicadas a Santo Domingo y San Francisco.
En el alto relieve del siglo XIX localizado en el porche de acceso a la iglesia del ex convento San Francisco, los trabajos han permitido recuperar su policromía original. Colores vivos que realzan la importancia y presencia del relieve, que representa la tradición de la fundación de dicho convento en 1214 por San Francisco de Asís gracias a la donación de terrenos por el matrimonio Novallas.
También se ha intervenido de urgencia en la inscripción del relieve de la Prudencia que forma parte del conjunto renacentista de la fachada del Ayuntamiento, frenando así el deterioro de la misma y garantizando su legibilidad.
Además, el personal de la FTM, encargado de la gestión y de los servicios turísticos de los monumentos, detectó carcoma activa en el facistol mudéjar de la Iglesia de Sta. Mª Magdalena, por lo que se consideró actuar de urgencia realizado un tratamiento anticarcoma.
Todos los proyectos de restauración cuentan con la supervisión de la Dirección General de Patrimonio Cultural de Aragón, institución a la que también se remiten las memorias finales de intervención donde hay un epígrafe dedicado a la conservación.
