El alumno de la UNED de Tudela, Fernando Casado, ha realizado prácticas de formación este verano en los Yacimientos de la Sierra de Atapuerca (Burgos), descubiertos, por azar, en el S.XIX. “Cada capa que se excava es como una página del libro de la Historia que es leída y destruida al mismo tiempo”, comenta Casado. “Hay que ‘leerlo’ muy bien para poder compartirlo con los demás investigadores”, añade. Por otro lado, destaca el uso de nuevas tecnologías así como el aspecto humano de su estancia. Todo ello han conformado una experiencia inolvidable para Casado. “Atapuerca es el sitio ideal para motivar el conocimiento de nuestro pasado. Cuenta con un fabuloso equipo humano y técnico para ayudar a conseguirlo. Intento retener en mi cabeza las impresiones, recuerdos y, sobre todo, conocimientos que he podido adquirir en esta increíble oportunidad. Desde luego, será difícil de borrar”, concluía.
