El juego del ahorcado
Con una película grabada y ambientada en Navarra, de directora navarra y enmarcada en uno de los momentos más convulsos de la historia de España, la Guerra Civil, dio comienzo la exhibición de filmes que participan en la XV Muestra de Cine Español de Tudela. Y lo hizo de la mano de La Buena Nueva, el último trabajo de la pamplonesa Helena Taberna.
Como “una película de reconciliación, de abrazo que calma el dolor no ocultándolo, sino mostrándolo”. Así definió Taberna su obra, basada en la historia de un tío suyo que llegó como sacerdote a Alsasua el 16 de julio de 1936. “Creo en el cine que cuenta buenas historias y en esta película quisimos contar algo más de lo que pasó en Alsasua, experiencias de otros pueblos”, recorgó la directora, quien destacó que La buena nueva ha sido una de las pocas películas que han funcionado bien este año.
Junto a Taberna estuvieron en Tudela Bárbara Goenaga, una de las actrices principales del filme, y el guionista Andrés Martorell. Ambos elogiaron el trabajo de la regidora navarra.
Camino
Además de acercar hasta la ciudad a algunos de los mejores actores y directores del panorama cinematográfico actual, la muestra de cine posibilita que se puedan ver películas no estrenadas en la capital ribera. Es el caso de El juego del ahorcado, un filme de Manuel Gómez Pereira ambientado a finales de los años 80, donde la tensión es constante. “Ese era el objetivo que perseguíamos cuando escribimos el guión. Es la primera vez que adapto una novela y, aunque no tiene nada que ver la estructura con la película, a mi su lectura me produjo esa sensación de tensión”, explicó Gómez, quien dijo que el filme “tiene el trasfondo de un thriller, del cine negro”. “Para ello trabajamos el deseo, la pasión y el amor, porque producen dolor", afirmó. Acompañando a Gómez, estuvieron la productora del film, Ana Amigo, y su protagonista femenina, Clara Lago, que ya había estado en la muestra presentando El viaje de Carol. La actriz reconoció que fue “la amistad” que tenía con Álvaro Cervantes (protagonista del filme) la que facilitó el rodaje de las “escenas fuertes” de la película.
Los años desnudos
A sus 12 años, Nerea Camacho se convirtió en la verdadera protagonista de la presentación de Camino. La joven intérprete, Goya a la actriz revelación por encarnar a una niña que vive sus últimos momentos en la habitación de un hospital, viajó hasta Tudela acompañada de sus padres y de la también actriz Ana Gracia.
Camacho, que afirmó “seguir siendo la misma de siempre pero con un Goya en el salón”, afirmó que no esperaba ganar este premio. “Desde pequeña me gusta este mundo y cuando me llamaron para hacer la película no me lo creía y, cuando me dieron el Goya, mucho menos todavía”, reconoció la joven, quien se mostró muy resuelta y espontánea ante los medios al mismo tiempo que no tuvo ningún reparo en afirmar que, antes de hacer la película, “no sabía nada del Opus Dei y, ahora, menos”. Por su parte, Ana Gracia afirmó que “lo que le había llamado la atención” es que esa película pudiese hacerse. “A mí me estimuló mucho, por-que al margen de que pueda o no traer cola poder hablar del Opus Dei, con la influencia que tiene en este país, está muy bien que se airee”, manifestó la actriz.
Con las ideas muy claras, a pesar de su corta edad, Nerea Camacho mostró su deseo de seguir en el mundo del cine. “Quiero que todo esto siga. Ahora sé que tengo que seguir con los estudios, aunque tengo varias ofertas y espero poder hacer alguna de ellas, porque lo estoy deseando", comentó.
Ana Gracia, actriz más experimentada, no dudó en darle consejos para que su carrera siga creciendo. “Ahora se está haciendo como actriz y necesita estar bien rodeada para cuidar el talento que tiene, porque ahora está a flor de piel y hay que tener mucho cuidado. Para ello es muy importate el apoyo de los padres”, reconoció Gracia.
Los años desnudos, de los directores Dunia Ayaso y Félix Sabroso, fue la encargada de clausurar la décimo quinta edición de la muestra, que ha contado con 2.100 espectadores (200 más que en la última edición). Ambos fueron los encargados de presentar ante el público tudelano esta obra que cuenta la historia de tres mujeres que, durante la Transición, se dedicaban a hacer cine clasificado S. Protagonizada por Candela Peña, Mar Flores y Goya Toledo, narra la vida de estas chicas con el trasfondo de un país que iba cambiando a la par que despertaba de un letargo de años de represión.“Creían que el mundo iba a cambiar, pero eran unas grandes criticadas”, manifestó Ayaso, quien recordó que “la gran mayoría de esas mujeres dejaron de hacer películas cuando desapareció ese cine ya que fueron estigmatizadas”, reconoció la directora.
