Érase un hombre a una flauta pegado,
érase un flautista superlativo,
érase un pito solfa hiperactivo
que al compás que toca danza animado.
Era un señor orquesta sublimado
de partitura en contracanto altivo
que ante su mostrador -pandero activo-
redobla y silba a ritmo acompasado.
Era al mismo tiempo tenor y bajo
que a coro canta o emplumado trina
y harmónica sopla en público tajo,
que baila a solas tonadillas finas,
cubanos aires… ¡sones del carajo!
jotas, valses y contradanzas chinas.
De este portento en música a destajo,
¿Qué es lo que usted piensa..? ¿Qué es lo que opina…?
Jesús Martínez Ausejo
Consentido del humor