El sector del mueble se mueve con los tiempos. Y pese a que la diversidad y la no existencia de un único estilo son las características que imperan, el gusto del consumidor parece inclinarse mayoritariamente, hacia la eliminación de lo superfluo y de todo aquello que no aporta nada a nuestra decoración. A cambio, se prefieren los espacios despejados y nada recargados, con montajes prácticos y funcionales, de pocas piezas y muy concretas. Una tendencia marcada también por las líneas rectas y depuradas y la mezcla de estilos. En cuestión de colores, el gris ceniza viene pisando fuerte esta temporada en la que el boom del wengé toca a su fin.Y junto a él, la apuesta es muy clara hacia otras tonalidades como blancos y tecas. En lo que respecta a materiales, en la variedad está el gusto y la oferta es tan amplia que abarca desde las chapas sintéticas, hasta maderas naturales, de roble o cerezo.Y otros dos apuntes. El chaisse longue se ha convertido en el rey de los sofás, donde se ha colado también la piel y los tapizados barrocos, igualmente presentes en sillas, sillones y hasta en las camas.
De todos los precios
Por otro lado, tan importantes o más como los propios muebles lo son en decoración los complementos y accesorios como cuadros o espejos. Así lo atestiguan los expertos, y así lo comparten también la mayor parte de los profesionales del sector ubicados en la Ribera. Entre ellos, Laura Sancet y José Luis García, de Muebles Antón, en Tudela, quienes apuestan por este tipo de elementos porque “acentúan los espacios y aportan el toque final y personal al conjunto del amueblamiento”.
Manuela González, de Muebles Madurga, nos indica que si bien para gustos los colores, por lo general “el público más joven busca la funcionalidad y los estilos más atrevidos, aunque se pasen antes de moda. Además, se suelen dejar aconsejar”.
Decoración Zen
Una opinión que comparte Virginia Magaña, de Muebles Alvero en Cintruénigo, quien añade que “la gente mira un poco todo, pero sobre todo que no sea un mobiliario excesivamente caro y que se adapte a sus necesidades”. Desde Alvero vuelven a incidir además en el aspecto minimalista. “Hoy en día la gente prefiere tener una televisión muy grande y menos muebles. Los armarios grandes en los que se guardaba de todo ya no se demandan apenas”, dice Virginia Magaña.
Así pues, a modo orientativo, el precio de un sofá chaise longue ó 3+2 puede oscilar entre los 1.200 y los 1.800 euros, siendo los de este último precio de una calidad importante, según José Luis García, de Muebles Antón.
En el caso de los salones, “los muebles acoplados de estilo moderno” son los más demandados, según indica Idoia Díaz, de Muebles Arriazu en Ablitas, quien admite no obstante que “hoy en día se lleva todo”. En esta línea, un conjunto modular viene a costar de 1.200 a 3.000 euros, a lo que se puede añadir después un conjunto de mesa con sillas cuya oferta varía entre los 1200 y los 2000 euros.
Por último, si hablamos de dormitorios con armario, el intervalo de precios se amplía algo más, situándose entre los 1.500 y los 6.000 euros.
En definitiva, de todo y para todos los gustos y bolsillos
