Joaquín Olona, consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Gobierno de Aragón, abogó en el Foro de la Lonja del Ebro, en Mercazaragoza, por “dejar que el mercado agroalimentario funcione de forma natural y centrar la política agraria en la compensación de rentas a agricultores y ganaderos”. Afirmando, además, que “los precios de los alimentos son inestables a corto plazo y descienden a largo”.
“La concurrencia, la transparencia, la ausencia de barreras o el libre acceso a la información son condiciones necesarias para que el mercado funcione y asigne de forma eficiente los recursos”, aseguró.
Asimismo, propuso “centrar la actividad política sobre los factores estructurales que determinan esa renta, entre los que destaca la productividad del trabajo, la profesionalidad, la dimensión económica de las explotaciones, la transferencia de conocimiento o la innovación”, indicó.
“Se requiere una política agrícola que ayude a lograr una agricultura más productiva y más coherente e integrada con el mercado, la economía, la sociedad y el medioambiente”, resaltó. “Los precios se comportan de forma caótica, y los agricultores pierden poder adquisitivo con respecto al resto de los ciudadanos”, dijo.
