Nueva planta potabilizadora
El agua vuelve a protagonizar la actualidad de la villa de Cortes pero, en esta ocasión, la de boca. Un análisis realizado hace 5 meses por un laboratorio tudelano detectó la presencia en la misma de trihalometanos (componentes cancerígenos que se forman de la reacción del cloro con que es tratada el agua en la depuradora y la propia materia orgánica presente en el líquido. Proliferan en mayor medida en periodos de lluvia y verano), en un nivel superior al permitido. Como medida preventiva, el alcalde, Javier Blasco, asegura que “se avisó a los vecinos por megafonía” pero que “fue algo puntual y todos los análisis posteriores del Instituto de Salud Pública han salido bien por lo que no hay que alarmarse, ya que el agua es apta para el consumo”. Desde la oposición, el edil del grupo independiente César Alba no lo tiene tan claro y presentará una moción al próximo pleno para que se envíe una circular a los vecinos desaconsejando el consumo. Además, la formación ha solicitado una reunión con Administración Local y con la CHE, sin que hasta la fecha haya obtenido respuesta, y pide que el agua sea captada de la Mancomunidad del Moncayo. “Creemos que debemos seguir en esta pelea y, bajo nuestro punto de vista, mientras no nos demuestren lo contrario las analíticas, no es nada recomendable beber este agua. Creo que en los análisis que se realizan cada 15 días no se analizan todos los componentes ”, dice Alba. El alcalde, no obstante, asegura en una circular enviada recientemente a la población que “el último informe realizado por el ISP con fecha, 30 de marzo, concluye que, analizados más de 25 componentes del agua de Cortes, todos cumplen con los parámetros establecidos en la ley”.
Charla informativa
Procedente del Canal de Lodosa desde hace más de 40 años, el agua que beben los cortesanos está catalogada en el nivel A3 (nivel inferior de los 3 que existen) y las dudas sobre la calidad de la misma se remontan a hace más de una década. Ya en 2005, un informe técnico revelaba que el 95% de los cortesanos consumían agua embotellada. En este sentido, Javier Blasco añadió que “en el afán por mejorar la calidad de nuestra agua, estamos invirtiendo en una nueva potabilizadora, dotada de alta tecnología, unos depósitos con capacidad para 2.300.000 litros y una nueva tubería de hierro fundido para traer el agua hasta el pueblo, con un presupuesto de 2.068.054,80 euros”. Cuando el Canal de Navarra llegue hasta Ablitas, el agua de Cortes será captada de allí, lo que para todos los grupos del Consistorio solucionará estos problemas. No obstante, la polémica en torno al tema está servida en la villa y los vecinos lo viven con cierta confusión.
Para tranquilizar e informar a la población, tras las últimas informaciones publicadas en los medios en torno al tema del agua, el Instituto de Salud Pública ofreció una charla en la villa este lunes día 23. En ella se puso de manifiesto que el agua se analiza dos veces al mes y que la evaluación es completa, es decir de todos sus elementos, incluidos los trihalometanos.
Según opinó el edil de UPN en el Consistorio cortesano, Ismael Miñes, más cercano a la postura socialista que a la del grupo independiente de la localidad, “creo que efectivamente los análisis están dentro de los parámetros normales y que lo de los trihalometanos fue algo puntual. No podemos desconfiar de lo que evalúe el Instituto de Salud Pública”.
