El pasado sábado, el II Mugre (Musikus Gremium) Eguna pilló por sorpresa a los corellanos y, para muchos de ellos, fue una grata sorpresa encontrar tanta animación en la villa al salir a la calle durante las primeras horas. Más de 80 personas se habían apoderado del centro urbano, convirtiéndolo en una fiesta, con un incansable sonido de charangas. Eran los músicos de 17 formaciones charangueras que volvieron a reunirse, por segundo año consecutivo, para compartir una alegre jornada como colofón a un intenso verano que han vivido la mayoría, trabajando de fiesta en fiesta.
Las charangas
Para organizar la jornada, cada asistente aportó la cantidad de 70 euros con lo que se sufragó un completo programa que se inició con un pasacalles por las principales de Corella. Entre vuelta y vuelta, los músicos se detuvieron en varias ocasiones para degustar pinchos y llevar su música al interior de los bares corellanos. Posteriormente, los músicos compartieron una comida en la carpa municipal, con su correspondiente sobremesa y, de nuevo, otro pasacalles. El alcalde de Corella, Ramón Jiménez, también se unió a parte de esta merecida fiesta en la que los instrumentos se hicieron sonar por placer y no obligados por el trabajo, ni por estresantes y duras jornadas en las fiestas de muchos pueblos.
Los músicos que participaron en el II Mugre Eguna pertenecían a las siguientes charangas de la Comunidad Foral: Mutil Gazteak (Pamplona), Malatxo (Tafalla), Ilumberri (Lumbier), Forri’s Tar (Artajona), Bakerías (Peralta), Nesken Iruña (Pamplona), Strapaluccio (Aldeanueva de Ebro), Aburrecalles (Lodosa), Jaiak (Barañáin), Riau-Riau (Fitero), Ribera (Corella), Aires de Corella (Corella), Txorongo (Alsasua), Igandea (Barañáin), Chino’s Band (Cascante) y Ohayo (Barañáin).
