Cintruénigo

El Departamento de Salud alerta de los riesgos de la medicación a través de Internet

La venta incontrolada de medicamentos a través de internet es un problema de salud pública y un riesgo real para los pacientes. La venta de medicamentos que requieren prescripción a través de internet es una práctica prohibida en España aunque,según datos de la Alianza Europea para el Acceso a Medicamentos Se-guros, el 60 % de los fármacos que se venden en la red son falsos. En España se han detectado casos de medicamentos comercializados a través de internet y los detectados con mayor frecuencia son los relacionados con estilos de vida, destinados a la disfunción erectil, obesidad, tabaquismo, trastornos del sueño, aumento del rendimiento deportivo, etc. La medicación a través de internet se ha multiplicado a causa de la accesibilidad de la oferta y de un cambio en la psicología de los usuarios, que ahora viven con mayor rapidez y tienen hábitos consumistas que se extienden a todos los ámbitos de la vida, también a la salud, lo que demuestra un ansia insatisfecha de bienestar a toda costa. Vale la pena, pues, recordar que los medicamentos son un bien esencial para la salud, que no obstante deben ser consumidos de un modo racional y bajo el control y consejo de un profesional, en ningún caso debemos considerar a los medicamentos como un simple bien de consumo. La venta de medicamentos por internet implica un cambio en el modelo sanitario ya que debilita la confianza en los profesionales preparados para atender y garantizar la calidad en nuestra sanidad. “Si el medicamento pierde su caracter de bien esencial para la salud, desaparecerá el concepto de uso racional y las garantías serán más difíciles de comprobar”, advierten desde el Depar-tamento de Salud. Todos los medicamentos poseen principios activos que al interaccionar con otros pueden generar incompatibilidades y producir graves efectos secundarios sobre la salud. Por esta razón, se deben obtener con garantías de calidad y consejo farmacéutico. Internet es hoy en día un canal de distribución deficiente, inseguro y rechazado por la mayoría de las organizaciones sanitarias a nivel mundial; por ello, la Agencia Española de Medica-mentos y Productos Sanitarios, dependiente del Ministerio de Sanidad y Consumo, ha establecido una estrategia nacional contra la falsificación de medicamentos, apoyada en campañas de información pública, medidas de control y detección precoz de medicamentos falsificados y un sistema de comunicación rápida para retirar los medicamentos fraudulentos una vez detectados.