De “demoledora” calificó Luis Casado, alcalde de Tudela, la sentencia emitida por el Tribunal Superior de Justicia de Navarra contra la empresa Alcuba, adjudicataria de las piscinas cubiertas de Tudela.
En ella se desestiman de forma definitiva todas las pretensiones de la contrata, entre las que se incluía el pago de más de un millón de euros en concepto de precios contradictorios que no habían sido aprobados por el Ayuntamiento. “A lo largo de la sentencia puede apreciarse cómo el Tribunal deja constancia de la pésima actuación de la parte demandante a la que, entre otras cosas, le achaca inventarse trámites procesales y confundir interesadamente conceptos”, comentó Casado, quien destacó que la empresa había sido condenada en costas. Del mismo modo, defiende tanto “la buena situación” en que queda el Consistorio ante las críticas de la oposición así como “el buen hacer de la dirección de obra y de los técnicos municipales, de los que criticaron su profesionalidad”. El alcalde, que definió este juicio como “el más importante económicamente para el Ayuntamiento” de todos los que tiene pendientes con Alcuba, destacó que la sentencia da “un cierto optimismo” a la hora de encarar los próximos litigios.
Gaztambide
Entre los puntos desestimados por el Tribunal se encuentra la recusación de la totalidad de la dirección facultativa por “enemistad y animadversión”. “La tesis del apelante nos llevaría al absurdo de considerar que toda Dirección facultativa en toda obra pública incurrirí en interés personal cuando discrepase de la contrata y manifestase opiniones técnicas contrarias defendiendo estas”, dice la sentencia. A su vez, Del mismo modo, se ha desestimado la petición de la empresa de recibir 108.078 euros por imposiciones de marcas y empresas. “Que en la ejecución de la obra conforme a las prescripciones técnicas del proyecto se barajen e informe a la contrata sobre empresas del sector que trabajen el objeto concreto de la obra de que se trate no implica imposición alguna”, recoge la sentencia.
Por otro lado, el alcalde afirmó que tras el concurso de acreedores de Alcuba -empresa que también se encargaba de las obras de reforma del teatro Gaztambide- el Ministerio ha entregado las obras a otra empresa “lo que nos da la tranquilidad de que van a acabarse dentro de los plazos que manejabamos”. Así, en octubre podría volver a abrir sus puertas el teatro después de permanecer cerrado desde 2002. En cuanto al equipamiento, Casado señaló que está previsto que, para final de mes, entreguen el proyecto. “Entonces lo sacaremos a licitación para adjudicarlo”, dijo el alcalde.
