Las próximas obras en el campo de fútbol de Cintruénigo, que incluyen la instalación del césped artificial y de la nueva iluminación, además de la reforma de los vestuarios, obligará al equipo de Tercera División a jugar su último partido en casa, en la localidad de Corella. Esta previsto que den comienzo el 8 de mayo, a falta de tres jornadas para concluir la liga, una de las cuales deben jugarla como locales.
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Por ello han llegado a un acuerdo con el Corellano para poder disputar este partido en su campo. “Mantenemos muy buenas relaciones con ellos y se han puesto a nuestra disposición para solucionar el asunto”, explicaba el presidente cirbonero, Antonio Sáez. La ilusión de Sáez es que se cumplan los plazos de la reforma y poder comenzar la pre-temporada en el nuevo campo. “Ya que hemos adelantado las obras, que se iban a acometer a finales de mayo, estamos mentalizando al Ayuntamiento para que estén listas en el tiempo previsto porque si no podríamos crearle un pequeño problema al Corellano y no queremos causarles molestias”, indicaba.
El punto obtenido en el partido frente al Aluvión el pasado fin de semana les ha colocado quintos en la clasificación, un puesto en el que es fácil soñar con la fase de ascenso. “No me veo ni me dejo de ver ahí arriba. Nuestra meta no es el ascenso, pero a nadie le amarga un dulce y vamos a luchar por ganar todos los partidos”, afirmaba el presidente.
