Fontellas ha sido la primera localidad ribera en dar rienda suelta a la alegría y diversión que traen consigo los Carnavales. Los vecinos más pequeños de la localidad protagonizaron el pasado fin de semana la mayoría de los actos de estas populares fiestas.
El punto final: Villafranca
En Tudela y el resto de localidades vecinas, los Carnavales llegarán este fin de semana -24,25 y 26 de febrero- con un marcado toque cervantino. Según señaló Mª Carmen Buñuel, de Aderezzo, dos de los disfraces que más se están vendiendo emulan a don Quijote y Dulcinea. “También piden mucho el de samurais y geishas y la combinación de torero y sevillana, pero siempre este último para los chicos que también optan mucho por el de escoceses”, comentó Buñuel.
Villafranca será la localidad encargada de despedir el Carnaval el fin de semana del 3 y 4 de marzo. Lo que hace más de veinte años fue un descuido a la hora de marcar las fechas para esta celebración, se ha convertido en toda una tradición y seña de identidad de un pueblo en el que sus vecinos participan de forma activa en la preparación de estos días de fiesta. Y es que los carnavales de Villafranca son diferentes. El viernes, todos los que salgan a la calle lo harán disfrazados de tribus urbanas. “Cada año los jóvenes ponen una temática y nos disfrazamos todos de lo mismo. El sábado, además, hay varios desfiles. El primero es el infantil, luego sale el de adultos, en el que participarán quince grupos, y el de carrozas”, explicó el edil Gorka Azcona. Este último, en el que tomarán parte diez composiciones, es el más espectacular. “Preparar las carrozas supone mucho trabajo, por eso repartimos cinco premios, el más importante de 700 euros”, dijo el edil. En los otros dos desfiles el Ayuntamienrto, que ha dedicado una partida de 9.000 euros a los Carnavales, también repartirá varios premios.
