Cascante

EDER ha sido beneficiado con 5,7 millones para la gestión de los fondos FEADER para el sector primario

1235552248.jpg



Impulsar el desarrollo integral y sostenible de la Ribera a través de la búsqueda de proyectos, programas e iniciativas es el objetivo de Consorcio EDER. Creado en 1994 y presidido por Rafael Remírez de Ganuza, a él pertenecen 27 municipios de la comarca así como diversas asociaciones.


¿En qué ha estado trabajando EDER en el último año?

El año pasado fue peculiar porque acabamos el proyecto Leader Plus, unas ayudas que venían de Europa destinadas a fomentar la mejora del patrimonio cultural, histórico y geográfico y a las que cada ayuntamiento fue presentando sus proyectos. Durante los años que duró esta iniciativa se asignaron ayudas por valor de 4,7 millones de euros a un total de 139 proyectos, cuyas inversiones totales fueron por valor de 9 millones.


¿Y en qué lo va a hacer a partir de ahora?

Ahora empiezan unos nuevos fondos europeos, los FEADER, destinados al sector primario, a la agricultura. Entonces, tras la experiencia que tiene el grupo de acción local Consorcio Eder en la gestión de fondos europeos a través de iniciativas para el desarrollo rural como Leader 2 y Leader Plus, ha sido beneficiado para el periodo 2007-2013 con un importe de 5.725.493 euros para la gestión del eje 4 Leader del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural, que conllevará una inversión total de 11 millones de euros en la comarca. Por ello, este año es un poco de transición, aunque se está empezando a preparar ya el concurso para presentar las condiciones en las que podrán solicitar los consorciados, en este caso los ayuntamientos, este tipo de ayudas para el sector primario.

Junto a esto, también hay una serie de proyectos que hay que ir resolviendo en el día a día del Consorcio. Ahora, además, nos encontramos preparando el cierre del año pasado y la convocatoria de la asamblea general.


¿Cómo se encuentra actualmente el Consorcio?

El consorcio anda mejor que nunca, porque hay una gran participación. Está muy bien aceptado en su desarrollo por todos los consorciados, hay unanimidad, y seguimos intentando ser útiles, aunque hay ámbitos que tenemos que ir desarrollando. Nos gustaría intentar mejorar en temas medioambientales, ya que interesan a todo el mundo, y el Consorcio puede ser un centro donde se pueden agrupar este tipo de servicios. También están ahí los proyectos turísticos, de los que ya se han llevado a cabo numerosas iniciativas. Comenzamos con la Asociación de Turismo de la Ribera de Navarra (ATURINA), que sigue su andadura buscando el desarrollo del valle del Queiles y no se han dejado de hacer cosas, como la presentación de la guía del Románico en PDA, que también ha tenido gran éxito. También queremos conseguir cosas en el ámbito del transporte comarcal, para lo que hemos pedido a los ayuntamientos que planteen al departamento sus carencias. En definitiva, canalizamos las demandas de todo tipo que surjen en el Consorcio.


- Entre uno de los proyectos que preparaba EDER se encontraba la construcción de un centro multifuncional para toda la Ribera que iba a llamarse CIERZO. ¿Qué ha sido de él?

Aquello lo paramos a petición de varios ayuntamientos, porque coindidió en el tiempo con la iniciativa que desarrolló Bardenas Reales de construir en Aguilares un centro de estudios de la naturaleza con bastantes similitudes a lo que nosotros planteábamos. Entonces, los congozantes que también eran consorciados se encontraron con que tendrían que atender esas instalaciones en lo que a mantenimiento se refiere, cosa que también hubieran tenido que hacer con nuestro proyecto. A través de ellos, negociamos con Bardenas y, aunque en principio, tenían previsto construir un auditorio para 300-400 personas, desarrolló una ampliación de ese proyecto para llegar hasta 750 plazas y dar respuesta a las necesidades que nosotros habíamos detectado.


¿Y cómo están esas negociaciones?

Ahora tienen elecciones y supongo que, cuando pasen, pondrán en marcha el proyecto. A partir de ahí, deberíamos sentarnos con Bardenas para desarrollar un convenio de colaboracion ya que, en una primera fase, analizamos un teórico convenio con Bardenas para que el Consorcio fuera un usuario prioritario de las instalaciones.

Pero la ubicación no responde a la prevista inicialmente.

No es un entorno urbano, pero también tiene su interés. Estar aislado también puede contribuir a buen fin de cualquier tipo de congreso. Hay que tener en cuenta que el consorcio funciona más con voluntad y ánimo que con recursos específicos como para hacer todo lo que nos gustaría.


¿Qué opina del Comité de Expertos de Alto Nivel de MODERNA?

A título personal, lo considero un paso muy, muy interesante. Pero lo que no podemos confiar es que en este tipo de reuniones demos con la varita mágica para que Navarra encuentre la solución a todos los problemas que tiene, porque es difícil. ¿Qué resultados habrá? El tiempo nos lo dirá, pero mi opinión es que este tipo de iniciativas en las que convergen cantidad de opiones y de ilusión por parte de cada uno de los que están, va a ser positivo en Navarra ¿A qué nivel? Ya lo veremos, y de lo que ahí salga se podrán relanzar cantidad de iniciativas nuevas encaminadas a esos objetivos.


¿Por dónde podrían ir esos cambios para que vaya mejor Tudela?

No soy un gurú del tema, pero para mí esta crisis -que va a ser fuerte, dura y nos vamos a tener que purgar bien- va a ser buena porque, nos guste o no, va a haber un antes y un después ya que no solo hablamos de crisis por el boom inmobilirario, sino en las formas de vida que he-mos tenido. Hemos entrado en una situación de recesión de la que se saldrá, pero echando mucha imaginación, cambiando el estilo de vida y, por supuesto, con trabajo. Hay que estar ojo avizor a lo que hay e intentar ser lo más productivos posible