El vecino de Milagro R.G.A, de 34 años y con antecedentes relacionados, fue detenido el pasado 9 de marzo por tentativa de robo, resistencia y agresión a agente de la autoridad. Los agentes de una patrulla de la Policía Foral que circulaban de madrugada por el casco urbano de Milagro observaron a un individuo que, al percatarse de su presencia, intentó esconderse. Los policías, a la vista de su sospechoso comportamiento, le dieron el alto y, tras identificarlo, vieron que portaba diversas herramientas como una barra de uñas, un martillo, un destornillador, un corta-alambres, guantes de látex y una linterna. Al ser interrogado, reconoció que tenía intención de robar en un establecimiento de la localidad, y cuando los agentes procedían a detenerle, opuso una notable resistencia y causó lesiones a los agentes.
También el 9 de marzo fue detenido J.M.R.V, de 46 años, residente en una localidad de Tierra Estella, acusado de un delito de allanamiento de morada. El administrador de una urbanización de la misma localidad informó al Centro de Mando Coordinado de la Policía Foral de que había un vehículo ajeno a los vecinos de la urbanización estacionado junto a una vivienda. La patrulla que acudió a inspeccionar la casa encontró en su interior a un varón que había forzado una ventana para poder entrar, por lo que fue detenido por allanamiento de morada y una falta de daños.
J.J.G, de 32 años y domiciliado en una localidad de la Merindad de Olite, fue detenido el 10 de marzo acusado de una tentativa de delito de hurto y daños. Los hechos ocurrieron en otra localidad próxima, cuando un vehículo accedió a una finca y su conductor se apoderó de unos tubos de hierro que se encontraban en el lugar. El propietario observó lo ocurrido y alertó a la Policía Foral, mientras colocaba su coche de forma que obstaculizaba la salida del atracador, que le embistió con el suyo sin conseguir escapar. Tras dar marcha atrás, devolvió los tubos metálicos para evitar ser denunciado, pero al dejarlos abandonó también, sin darse cuenta, un bastón de su propiedad, lo que posibilitó su incriminación.
Finalmente, el 11 de marzo fue detenido H.E.K., de 19 años, vecino de Cintruénigo, como presunto autor de un delito de lesiones. Dos personas discutieron a la salida de un bar de Cintruénigo, y una de ellas golpeó con una botella en la boca a la otra, que sufrió un traumatismo y la pérdida de una pieza dental. La víctima presentó ante la Policía Foral una denuncia acompañada de un parte de lesiones y, tras localizarle, el agresor fue detenido.
