Raquel Garbayo (UPN) llegó en 2011 al Ayuntamiento de Cintruénigo trayendo consigo un giro drástico en la política municipal de la villa. La regionalista sucedió en el cargo a Adolfo Navascués (PSN), quien recientemente presentó su dimisión. Tal decisión no estuvo exenta de polémica entre ambos grupos políticos. Garbayo asegura que "es hora de pasar página y ponerse a trabajar" y que los convulsos días previos a las fiestas que se han vivido en el salón de plenos no afectarán al desarrollo de unas fiestas de las que ella presume.
¿Cómo afronta las fiestas?
Pues muy bien, con ganas, como siempre, aunque esta vez van a ser un poco diferentes. He sido madre hace cinco meses y voy a vivir estos días de otra manera. Si ya de por sí había cambiado mis hábitos, ahora todavía más. Por ejemplo, el salir por la noche lo dejaré totalmente aparcado.
Después de los últimos movimientos que ha habido en el Ayuntamiento, con la dimisión y la carta de Adolfo Navascués, ¿se encuentran los vecinos algo alterados?
No lo creo. Eso ya es agua pasada. Sinceramente, ya sabíamos que este señor iba a dejar su puesto. Lo que ocurre es que él puso como excusa lo que supuestamente ocurrió el día de su dimisión para anunciarla. Ahora debemos centrarnos en trabajar y restablecer las cosas. No soy la única que pienso que este cambio ha sido a mejor, hay personas con posturas políicas diferentes a la mía que también lo consideran así. Esto no va a cambiar ni un ápice el ánimo de los cirboneros de cara a las fiestas.
¿Qué balance hace de la legislatura hasta el momento?
Diría que es un balance positivo. Hemos hecho pequeñas obras que han mejorado el pueblo, y una última más importante como es la de la rotonda de entrada y salida a Cintruénigo en el cruce de la carretera de Madrid.
No se ha podido acometer el puente que estaba proyectado porque su coste era muy alto, pero la rotonda va a evitar muchos accidentes en una zona que era punto habitual de siniestros.
Por otra parte, definiría esta legislatura como la de la gestión. Hemos conseguido ponernos al día en aspectos relativos a las cuentas, que estaban muy desactualizadas cuando llegamos. En ese sentido, hemos traído un poco de orden.
Cambiando de tema, siempre dice que su acto favorito es el Gigantón. ¿Qué haría usted sin Gigantón?
¡Es que no permitiría que se suprimiera! Significa mucho para los cirboneros. Es todo. Los gigantes, la banda de música... pero es que es único. Y no es porque yo sea de Cintruénigo. Puedo decir que en ninguna otra localidad los gigantes lo hacen tan bien como los miembros de nuestra comparsa.
Si un marciano llegase a Cintruénigo, ¿qué actos le recomendaría como imprescindibles?
Hay tantos actos para tantos gustos diferentes... Se puede disfrutar el programa desde las 10 hasta las 3 de la madrugada. Las orquestas y las rondas de charangas son increíbles. Y quiero poner una lanza a favor de los festejos taurinos, que este año prometen mucho. Fuese marciano o humano, le diría que intentase no perderse nada.
¿Qué echa más de menos en fiestas por ser alcaldesa?
La foto de cuadrilla que se hace en mi peña después del chupinazo. Hace muchos años que no estoy.
Un mensaje para cirboneros y vecinos de la Ribera para estas fiestas.
A los cirboneros, debo agradecerles su disposición para colaborar y organizar eventos. Y también quiero animarles a que olviden por una semana la situación que vivimos y salgan a la calle, que nos juntemos todos y olvidemos nuestras diferencias, aunque sé que hay gente que lo está pasando muy mal.
A los de otros lugares, que no duden en venir porque somos muy hospitalarios.
