Tarazona

Cruz Roja de Tarazona se apunta a #yocomprodesdecasa

El sector alimentación sigue trabajando duro en Tarazona, al igual que en toda España, y en todos los lugares del mundo, para que a las personas que estamos confinadas en casa por la crisis del COVID 19, no nos falte de nada.

Desde la ACT valoran el esfuerzo que nuestros asociados del sector alimentación están haciendo estos días, desde que el pasado 14 de marzo, el Presidente del Gobierno, decretara en España el estado de Alarma, en prevención de la propagación del COVID 19.

Durante las últimas semanas hemos sido testigos de cierres de todos los establecimientos que integran la Asociación de Comercio, Servicios e Industria de Tarazona, hostelería, moda, talleres, pequeñas empresas, despachos y profesionales dedicados a cualquier actividad, que no sea considerada de necesidad básica. Es responsabilidad de toda la ciudadanía, y de todo el tejido comercial y empresarial cumplir con esta orden, por el bien de todos.

Sus asociados del sector alimentación no han parado ni un momento, ellos venden productos de primera necesidad, y han de estar en primera línea, sin parar, para que el resto paremos y nos quedemos en casa.

En estos momentos tienen la posibilidad de hacer la compra desde casa, a través de teléfono, WhatsApp y redes. Nuestros asociados nos ofrecen esa posibilidad, y están encantados de ofrecer ese servicio, para hacernos la vida un poco más fácil. Además, Cruz Roja de Tarazona se ha puesto en contacto con nosotros para ayudar, colaborar, prestando ese servicio ellos, a través de un grupo de voluntarios, que debido a la actividad que desarrollan de voluntariado tienen permiso de las autoridades para transitar libremente por las calles.

Los clientes tendrán que llamar a las tiendas, hacer el pedido, los comerciantes prepararán los encargos y avisarán a Cruz Roja, los voluntarios irán a las tiendas a recoger los paquetes, y los llevarán a los domicilios de los clientes. Este servicio está pensado, principalmente, para personas mayores, para evitar que salgan de casa, pero también puede prestarse a cualquier persona que lo necesite. No se pone límite en cuanto al importe de la compra, pero se entiende que han de ser compras, por ejemplo, semanales.

Los voluntarios no tienen permitido tocar el dinero, por razones de higiene y de tiempo, así que, en el momento de efectuar la compra, el cliente y el comerciante han de concretar la forma de pago más conveniente para ambos.