Corella inauguró la semana pasada, tras ocho meses de obras, la nueva sede de su Policía Municipal, ubicada en los bajos del Ayuntamiento. En el mismo acto inaugural, en el que el alcalde, Ramón Jiménez, estuvo acompañado por el Consejero de Administración Local, Alberto Catalán, tomaron posesión de su cargo como nuevos agentes Javier Catalán López y Roberto Zapatero Ochoa. Ambos entraron a formar parte de una plantilla integrada por 13 hombres y una mujer.
La nueva sede de los agentes, de 102 metros cuadrados, consta de un despacho, oficina, sala de espera, sala de usos múltiples, archivo, recibidor, baños, vestuarios y zona de paso. La reforma y ampliación de la sede, ocupada anteriormente por Cruz Roja, ha costado 141.132,75 euros, cantidad de la que las arcas forales han sufragado casi el 70%.
El Consejero de Administración Local, Alberto Catalán, señaló que las nuevas instalaciones “vienen a cubrir la necesidad de protección, seguimiento y seguridad que demandaba una población con casi 7.500 habitantes”.
Carta de Servicios de Bienestar Social
El alcalde de Corella, Ramón Jiménez, calificó de “dignas” las nuevas dependencias de la policía, y destacó el hecho de que los agentes “ahora van a tener vestuarios masculinos y femeninos, una sala para merendar o cenar, un despacho donde realizar las denuncias y un espacio donde recibir al personal que se acerque a estas instalaciones”.
