En Navidad compartimos con amigos y familiares comidas y cenas. Son momentos de ilusión, de sentimiento y de reencuentros. Tenemos que evitar una serie de errores para poder disfrutar con salud de esos momentos entrañables.
Para las personas con medicación crónica es muy importante no interrumpir el tratamiento, las causas más frecuentes son el olvido, los desplazamiento a otros domicilios, viajes o porque pensemos que dejar unos días no tiene repercusión en la salud.
Si los días previos a las fiestas sienten síntomas de descompensación de cualquiera de las enfermedades crónicas se debe informar al medico, es mejor prevenir que luego tener que correr a urgencias el día que toda la familia está en casa.
Esto que comento es frecuente, pensemos que con los preparativos nuestra actividad aumenta, más compras, se cocina más, se quiere tener la casa arreglada antes de que lleguen las visitas y ese esfuerzo extra puede pagarse días después.
Los enfermos crónicos de corazón o pulmón no deben esperar a ver si se les pasa, esto puede suponer que unos días después la descompensación sea mayor.
Es recomendable vacunarse ahora de la gripe y neumococo para evitar tener un proceso gripal o neumonía en los días navideños.
En la alimentación es importante comer despacio, saborear y estar con plena consciencia. Dejar el móvil, disfrutar de la comida y la compañía. Es recomendable comer la misma cantidad que la habitual, pero alegrarnos el paladar con alimentos más especiales. Por ejemplo, el jamón y el lomo ibérico, con su grasa saludable; el berberecho o mejillón que aporta hierro; el marisco (gamba, langostino) sabiendo que tiene acido úrico. Las bebidas alcohólicas mejor de baja graduación como cerveza, vino o cava y limitando la cantidad, ya que muchos medicamentos se eliminan por el hígado interactuando con el alcohol. El pescado es un alimento ideal para la cena cocinado al horno; auténticos manjares de la Ribera como el cardo y alcachofa; un buen caldo casero desgrasado; ensaladas con un aliño especial añadiendo aguacate, nueces o frutos rojos completan un menú con alimentos cardiosaludables que pueden darnos satisfacción en la cena y cuidar nuestra salud.
¡Feliz Navidad y Año 2016!
Luis Mendo
Médico de atención primaria
