La semana pasada terminaron los primeros trabajos de restauración del Castillo de Ablitas. La actuación, centrada principalmente en la Torre del Homenaje, comenzó a principios de verano del año pasado y las obras fueron ejecutadas por el Gobierno de Navarra con un presupuesto de 1,5 millones de euros. Se trata de uno de los primeros objetivos para la restauración completa de esta fortaleza que data del siglo XII y que fue uno de los principales baluartes defensivos de Navarra frente a los reinos vecinos de Castilla y Aragón.
Dicha torre se encontraba en peligro de derrumbe ante el progresivo deterioro de una estructura que, desde hace décadas, presentaba importantes grietas, llegándose a producir el desprendimiento de varios sillares. En concreto, se ha cubierto la antigua estructura con nuevos sillares, conformando una recreación de cómo pudo ser la torre cuando fue levantada hace 9 siglos.
Las obras también han servido para instalar en el interior de la torre, que originariamente hizo la función de aljibe (depósito de agua), una escalera a través de la cual se puede acceder a la parte alta donde se ha dispuesto una especie de mirador desde el que se puede disfrutar de una vista panorámica del Valle del Queiles.
Próximamente se espera que pueda ser abierta al público para que puedan visitarla y disfrutarla.
