Dentro de los días de Semana Santa, en Cintruénigo la población cirbonera llevaba a cabo distintos actos realizados en la calle. Así el viernes previo al Domingo de Ramos, y con protagonismo de los jóvenes, tenía lugar el tradicional Vía Crucis nocturno a la ermita de la Purísima. Los jóvenes portaron una cruz y antorchas y leyeron las distintas estaciones.
El domingo de Ramos, frente a la capilla de la Residencia de Ancianos tenía lugar la bendición de los ramos y posteriormente la procesión en la que los niños de comunión vestidos de la época y portando ramos de olivo acompañaban a representación de Jesús entrando a lomos de un pollino en Jerusalén.
El Viernes Santo a las 8 de la mañana tenía lugar el Calvario, un Vía crucis por las calles del pueblo en el que participaban las imágenes del Cristo con la cruz a cuestas y El Crucificado acompañadas ambas imágenes por penitentes descalzos. Finalmente por la noche tenía lugar la procesión del Santo Entierro con todos los pasos de las distintas cofradías cerrando la misma la Dolorosa, el párroco Santiago Jiménez, la Corporación en Pleno y la banda municipal de música.
